Israel mata a un líder de la Yihad y la Intifada pide venganza
El jefe del brazo armado de la Yihad Islámica en la ciudad cisjordana de Hebrón, Mohamed Sider, ha muerto a causa de una explosión registrada en la casa donde se atrincheraba hoy jueves, según fuentes del Ejército israelí. Las facciones de la resistencia palestina han amenazado ya con vengar esta muerte.
La explosión, según esas fuentes militares, se produjo por la existencia de explosivos y armas en la casa donde lo tenía cercado una fuerza de elite, que finalmente la demolió esta mañana.
Más información
- Sharon permitirá que Arafat visite la tumba de su hermana
- Numerosas víctimas tras explotar una bomba en un autobús de Jerusalén
- Israel y Palestina rompen lazos con los grupos terroristas tras el atentado de Jerúsalen
- Al menos dos muertos en un ataque aéreo israelí en Gaza
- Bush ordena el bloqueo de cuentas de seis dirigentes de Hamás
- Cuatro muertos en dos atentados suicidas casi simultáneos en Israel
- Israel seguirá construyendo el muro pese a la oposición de EEUU
- Un israelí muerto y cuatro heridos tras un ataque de Hezbolá desde Líbano
Un dirigente de la Yihad Islámica en el norte de Cisjordania, Basam Saadi, dijo que el brazo armado de su organización tomará la represalia por la muerte de Sider, lo que describió como "un grave crimen por el que Israel pagará con soldados y colonos".
La resistencia respondió hace dos días con dos atentados suicidas que costaron la vida a dos israelíes, además de once heridos, la muerte de tres activistas de la Resistencia Islámica (HAMAS), entre ellos dos jefes locales del distrito de Naplusa, y de un manifestante, en el viejo campo de refugiados de Askar, ahora un barrio de esa ciudad.
En Gaza, un dirigente de la Resistencia Islámica (HAMAS), Ismail Abu Shanhab, dijo hoy que esos dos atentados suicidas en la localidad de Rosh Haain, y junto al asentamiento judío de Ariel, son "una respuesta natural" a las operaciones de las Fuerzas Armadas, y si continúan como hoy en Hebrón "tambièn nosotros lo haremos".
Tambièn militantes de las Brigadas de los Mártires de Al Aksa, afiliadas a Al Fatah, prometían "responder" a las "agresiones sionistas", aunque aseguraron que seguirán respetando la tregua.
El grueso de la población palestina, según un sondeo difundido días atrás por la prensa, respalda la continuación del alto el fuego, lo que coincide con las primeras señales de una mejora de la situación económica al reducirse el nivel de la violencia.