Las cámaras vinculadas a las pistolas táser, claves en el caso del hombre fallecido por disparos de la policía

A Coruña

Se mantiene abierto el procedimiento judicial activado tras la muerte de un hombre por disparos de un policía nacional el pasado 25 de diciembre, el día de Navidad, en A Coruña. Seguimos pendientes de la elaboración del atestado que la propia policía debe remitir al juzgado número uno, de guardia en el momento de los hechos. Los sindicatos policiales señalan que el agente que efectuó los disparos actuó en legítima defensa. Es clave la grabación de las cámaras de seguridad conectadas con las pistola taser que se usaron en un primer momento para intentar inmovilizar al fallecido. Las grabaciones y los testimonios de los presentes deberán determinar si el agente implicado habría perdido el equilibrio y quedó a merced del hombre perseguido, como indican los sindicatos policiales.

El fallecido, Henry Casimiro, tenía 34 años y tenía su domicilio habitual en Torrejón de Ardoz. Según fuentes cercanas a la investigación se encontraba en medio de un brote psicótico. El agente que efectuó los disparos comparecía en días pasados en la inspección de guardia de la Policia nacional para dar cuenta de los hechos. El suceso se produjo sobre las diez de la mañana del día de Navidad en un descampado a la altura de la calle Severo Ochoa. El hombre había huído hasta allí después de golpear con una barra de hierro varios coches, uno de ellos con el conductor dentro, en la Avenida de Arteixo. En todo momento mantuvo una actitud violenta, según la versión policial.

Los hechos se produjeron cuando uno de los policías perdió el equilibrio y cayó al suelo. La versión oficial señala que cuando el agresor iba a golpearlo con la barra de hierro, efectuó dos disparos, uno en una pierna y otro en un órgano vital que le causó la muerte.

El fallecido contaba con un amplio historial policial, el día 22 había sido detenido por la comisión de distintos altercados.

El uso de las taser va a ser determinante para conocer las circunstancias de este caso. No evitaron que finalmente el agente tuviera que acudir a su arma reglamentaria lo que provocó los disparos que llevaron a la muerte del hombre perseguido, pero sí ayudarán a determinar las responsabilidades por las cámaras que se activan con su uso.

La grabación de la actuación policial queda registrada y, a su juicio, es garantía para comprobar el uso correcto de las armas por parte del agente y como seguridad de la persona neutralizada. También va a permitir en esta caso conocer las circunstancias de la actuación policial porque la pistola eléctrica se utilizó sin resultado por la cantidad de ropa que llevaba el fallecido pero se grabó todo el escenario de los hechos.

La guardia civil carece de pistolas Taser a excepción de su unidad de seguridad ciudadana. Sí cuenta con estas pistolas la policía local de A Coruña o la de Carballo. La asociación unificada de la guardia civil pide que se dote de este medio a guardia civiles que actúan en patrulla y sin apoyos. Pone un ejemplo de las carencias del servicio.

Subraya que se ha dotado de más medios al cuerpo, ahora cuentan con chaleco antibalas propio y defensa extensible. No obstante los medios más costosos, asegura, tardan en llegar. Respecto a la falta de personal denuncia que hay policías de tráfico que van a tener que trabajar 48 horas en cuatro días.