Dimisiones en cadena en la unidad de Grandes Contribuyentes tras cesar a una inspectora

La Agencia ha aceptado la dimisión del jefe de la Delegación Central de Grandes Contribuyentes, Ignacio de Ucelay. Varios inspectores también han presentado sus dimisiones ante el desacuerdo unánime por el cese de la inspectora. La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda denuncia "la intromisión de criterios ajenos a los técnicos" y la "gravedad de traspasar una línea roja", en un comunicado interno a los trabajadores.

El motivo de la crisis abierta en el seno de la Delegación ha sido el rechazo de una inspectora de la oficina técnica a un recurso de la cementera Cemex contra una sanción de la multinacional. Según la información mercantil, Cemex tiene abierto un acta de inspección desde julio de 2011. De hecho, la sociedad provisionó 7 millones de euros para posibles sanciones e intereses de demora.

Los hechos ocurrieron el pasado jueves, 14 de noviembre, y desde entonces el revuelo y el malestar ha ido in crecendo. Tras el cese fulminante de la funcionaria -con cargo de libre designación-, varios inspectores apoyaron la decisión de su compañera presentado su dimisión, entre ellos, el jefe de la Delegación, Ignacio de Ucelay. Hacienda la ha aceptado y hay al menos otras dos dimisiones sobre la mesa.

Tal ha sido la reacción en el seno de la Delegación que el pasado viernes, tan sólo horas después del cese, el delegado central de Grandes Contribuyentes -launidad que fiscaliza las grandes empresas españolas- convocó a un amplio número de inspectores para explicar lo sucedido e intentar frenar el aluvión de dimisiones.

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La organización Profesional de Inspectores de Hacienda (IHE), mandó ayer un comunicado interno a sus trabajadores en defensa de la funcionaria - al que ha tenido acceso la Cadena SER- y en el que denuncian la gravedad que supone el relevo de los responsables del principal órgano de control inspector de la Agencia y "la intromisión de criterios ajenos a los técnicos, o de voluntades distintas a las de los órganos encargados de decidir los expedientes tributarios". Según los inspectores, "supondría traspasar una línea roja que, en caso de demostrarse y trascender públicamente ensuciaría la imagen del colectivo, que sería objeto de repudio público".

En el comunicado, este organismo profesional que representa a más de 1.400 inspectores -más del 90% de los inspectores-, aseguran que, a pesar de tener algunas lagunas sobre el detalle de lo sucedido, "la causa última del cese parece radicar en la firma de un acuerdo, mediante el que se resolvía un recurso de reposición contra una sanción tributaria derivada de un acta de disconformidad, el cual se produce en contra de las instrucciones dadas por la Delegación Central de grandes Contribuyentes".

Distintas fuentes del organismo consultadas por esta emisora, no conocen qué ha motivado exactamente un cese sin precedentes en la Agencia y barajan una posible orden política a favor de la multinacional.

La inspectora ya ha sido traslada a la oficina regional de Madrid. Los inspectores consultados no dan ni mucho esta crisis por cerrada.