Un exdirectivo de NovacaixaGalicia defiende que ahorró dinero al cobrar de golpe su pensión
Es el primero de los cinco exdirectivos de NovacaixaGalicia que declararán como imputados por administración desleal o apropiación indebida
Javier García Paredes ha asegurado ante el juez Ismael Moreno que ahorró 1,5 millones de euros a NovacaixaGalicia en concepto de intereses, al percibir de golpe los 5,2 millones que según asegura, le correspondían como prejubilación.
El exdirector general adjunto ejecutivo de la entidad lo cobró en dinero contante y sonante. Según fuentes jurídicas, le han preguntado en su declaración si alguien del banco le sugirió o él pidió cobrar lo pactado en participaciones preferentes y ha dicho que no. El reparto de las preferentes, bajo sospecha por supuesta estafa, sí que tuvo notable éxito entre los clientes.
Más información
- Hasta siete millones de fianza a cuatro exdirectivos de Novocaixagalicia
- Un exconsejero de Novacaixa se "enteró por la prensa" de los sueldos de los exdirectivos
- Anticorrupción se querella contra cinco directivos de Caixa Galicia y Caixanova
- La Audiencia Nacional acapara la investigación por delitos económicos
- Los ex directivos de Nova Caixa Galicia señalan al anterior director general
- El ex director de Nova Caixa Galicia contradice a la Fiscalía y defiende la transparencia de sus millonarias retribuciones
- Un exconsejero de Novacaixagalicia tira de la manta
En su comparecencia durante cerca de dos horas, García Paredes ha aseverado que la entidad de la que procedía, CaixaGalicia, dio beneficios antes de la fusión. Sin embargo, fuentes del caso han recordado que no pagaban los intereses de las preferentes.
Éste ha sido el primero de los cinco exdirectivos de NovacaixaGalicia que declararán como imputados en la Audiencia Nacional por administración desleal o apropiación indebida hasta el próximo lunes. Durante los próximos días comparecerán Gregorio Gorriarán, Óscar Rodríguez, José Luis Pego y Julio Fernández Gayoso.
La Fiscalía Anticorrupción se ha querellado contra ellos y les reclama 7,8 millones. Argumenta que "dispusieron de forma fraudulenta de bienes de la entidad", ocultando "al consejo de administración y al Banco de España" el importe de sus prejubilaciones.
La Fiscalía sostiene que "abusaron de sus funciones" y actuaron "con pleno conocimiento de la dificilísima situación económica" que atravesaba la caja.
Además, la querella añade que los gestores de las cajas gallegas "no tenían derecho" a cobrar estas prejubilaciones, lo que se hizo "en menoscabo de la entidad crediticia que administraban y del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB)".
