La Audiencia Nacional condena a 34 años de cárcel al etarra Mikel Otegi

La Audiencia Nacional ha condenado a 34 años de cárcel a Mikel Otegi por dos delitos de asesinato por la muerte de dos agentes de la ertzaintza. La fiscalía pedía una condena de 70 años pero los magistrados absuelven a Otegi de los delitos de pertenencia a banda armada, amenazas y coacciones.

La Audiencia Nacional ha condenado a 34 años de cárcel a Mikel Otegi que mató a dos ertzainas en la localidad guipuzcoana de Itsasondo. Los magistrados le consideran culpable de dos delitos de asesinato pero le absuelven de los delitos de pertenencia a banda armada, amenazas y coacciones, de los que también le venía acusando el Minsterio Fiscal.

Los hechos se remontan al año 1995, cuando Otegi volvía a su casa en coche después de una noche de juerga. Su conducción despertó las sospechas de una patrulla que le siguió hasta su caserío. Allí Otegi sacó una escopeta y mató a los dos agentes.

Dice la sentencia que el acusado "tiene un carácter impulsivo propenso a reacciones furibundas y había desarrollado la convicción, a partir de ideas sobrevaloradas, de que la ertzaintza le acosaba" pero no estamos ante un enfermo mental. Tampoco ante un miembro de ETA en el momento de los asesinatos. Según los magistrados, "su participación en algaradas, su desprecio a la policía vasca y su posterior integración en la banda terrorista, prueban su cercanía al pensamiento de ETA pero no su militancia"

Otegi ya fue juzgado y absuelto por estos hechos en 1997 por un jurado popular de la Audiencia de Guipúzcoa. El Tribunal de Justicia del País Vasco ordenó que el juicio se repitiera. Una decisión que fue avalada por el Tribunal Constitucional.

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