¿Quiere saber si su hijo está enganchado a Internet?

"Si un niño está en Internet cinco horas al día y si le quitas el ordenador monta la bronca del siglo, se pone incluso agresivo o se tira al suelo, estamos ante un posible síndrome de abstinencia y, por tanto, ante un problema de adicción", advierte Ángel Manuel Turbi, psicólogo experto en adolescencia y adicciones. Hay que diferenciar el uso del abuso, y aunque oficialmente la adicción a Internet no está reconocida, este psicólogo atiende a pre-adolescentes que no imaginan su vida fuera de la red, algo de lo que también ha advertido UNICEF.

Eugenia tiene 12 añitos y una considerable experiencia en redes sociales. Esta niña está conectada al mundo entero a través de un terminal que sólo maneja ella "tengo un móvil con Internet y estoy en Tuenti. Lo utilizo mucho, mucho". Según su perfil en esta red Eugenia tiene 14 años y no 12, Javi es de la misma edad, pero ha puesto que tiene 22 "así puedes pasar", -dice-.

"A partir de los 9 años los niños entran a Tuenti, -según la experta en redes Mar Monsoriu-, naturalmente lo primero que aprenden es a no poner su edad. Empiezan en un mundo virtual partiendo de una mentira"... y con el consentimiento de sus padres que siempre tienen la intención de controlarlos, de saber con quién se comunican en la red y las imágenes que suben, pero los niños reconocen que luego no lo hacen, "les pedí permiso y me dijeron que ellos podrían entrar, pero ya se les ha olvidado, -reconoce Casilda.

"Mis padres no tienen ni idea de cómo funciona. A mi madre una amiga le hizo de Facebook y muchas veces me pide ayuda a mí porque no tiene ni idea", insiste otra niña de 12 años. Los expertos advierten que la brecha digital entre niños y padres alimenta esta falta de control y recuerdan que los niños españoles tienen el record internacional de subir fotos a Internet, "yo he conocido niñas que han llegado a subir 5.000 fotos en cuestión de un mes" recuerda Mar Monsoriu.

Estamos ante la generación de los nativos digitales los niños saben más que los padres y es fácil que no les pidan ayuda si tienen algún problema, advierten, porque temen que les quiten el teléfono o el acceso a Internet.

Únete al canal de WhatsApp de la SER