La Conferencia de Roma acaba sin acuerdos concretos para alcanzar un alto el fuego en Líbano

La declaración final de la Conferencia de Roma sobre Líbano, leida por el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Massimo D'Alema, se limita a recoger la determinación de los países participantes "a trabajar inmediatamente para alcanzar urgentemente un alto el fuego que ponga fin a la violencia y las hostilidades".

Además de esta declaración de intenciones, los países reunidos en Roma consideran que el alto el fuego debe ser "duradero, permanente y sostenible". Por su parte, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, ha afirmado que los participantes en la Conferencia están de acuerdo en la necesidad de una fuerza de paz bajo mandato de la ONU.

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, considera que la reunión ha sido "fructífera" y ha "alcanzado los objetivos" porque se ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional ante la situación que vive Líbano.

El ministro italiano de Exteriores y anfitrión de la conferencia también transmitió el compromiso de los participantes a "dar ayuda humanitaria inmediata al pueblo libanés". En este sentido, invitó a Israel "a permitir la entrada de ayuda humanitaria en Líbano".

En el terreno de los discursos, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, ha reiterado su petición a las dos partes para que cesen las hostilidades. "Que Israel ponga fin a sus bombardeos, bloqueos y operaciones terrestres. Que Hezbolá frene sus ataques deliberados a ciudades israelíes", ha dicho ante los asistentes a la Conferencia de Roma. Sin embrago, ni Israel ni Hezbolá estaban representados en la cita diplomática en Roma.

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Solana, pesimista

Por su parte, Javier Solana se mostraba hoy en la Cadena SER pesimista sobre las posibilidades de alcanzar un acuerdo sobre un alto el fuego que frene los ataques sobre Líbano en la reunión de Roma.

Solana, que ha desvelado que anoche mantuvo una reunión preparatoria con la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice; el secretario general de la ONU, Kofi Annan; y el primer ministro libanés, Fuad Siniora, ha asegurado que se va a trabajar en la consecución del alto el fuego "con toda la fuerza posible", aunque ha reconocido que será una tarea difícil porque "es un alto el fuego de dos".

El principal problema que ve el Alto Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad Común es que "ninguna de las partes quiere volver a la situación anterior al inicio de las hostilidades".

Solana ha explicado que una decisión importante es el despliegue de una fuerza internacional en el sur de Líbano. "Sería la primera vez que Israel aceptaría la presencia de una fuerza de esta naturaleza", ha subrayado. El jefe de la diplomacia europea ha reiterado que esta fuerza, de desplegarse, sería "con mandato de Naciones Unidas".

Otro de los acuerdos que Solana esperaba que saliera de Roma era la puesta en marcha de una operación coordinada de ayuda humanitaria. "Creo que vamos a encontrar una respuesta muy positiva", ha explicado.