El restaurante italiano que estuvo a punto de 'ganar' la Champions para un equipo español

Madrid

La Semana de la Cocina Italiana en el Mundo se ha celebrado, oficialmente, entre el 13 y el 19 de noviembre, con multitud de actividades culturales y gastronómicas en varias ciudades españolas. Aún quedan algunas, como el refrigerio que se ofrecerá en el prestigioso Salone degli Specchi, tras el estreno de Turandot en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona. Muchos restaurantes, además, han preparado platos o menús especiales que, en muchos casos, mantienen hasta final de mes y que sirven para promocionar la riqueza y la diversidad de su despensa, con productos de calidad.

Pero lo cierto es que miles de españoles celebran la semana de la cocina italiana todas las semanas del año porque la pasta, el risotto, la pizza, el panettone o el tiramisú forman parte de su dieta habitual o del capricho delicatessen que se regalan a sí mismo de vez en cuando.

Este es el mejor panettone de supermercado y solo cuesta 6 euros

El futbolista Amadeo Carboni, exjugador de equipos como la Roma o el Valencia, ha sido uno de los embajadores de esta celebración gastronómica en España y, en una entrevista concedida a Gastro SER, ha dado algunos detalles de su idilio con la cocina.

La pasta al dente

"Cuando viajas por el mundo siempre te encuentras comida italiana o española", explica. "Y yo he viajado mucho, así que le he enseñado a muchos compañeros a preparar la pasta al dente, a distinguir la mozzarella fresca o a valorar la importancia de un buen queso parmesano".

Amadeo Carboni se considera un tipo curioso, en lo que a gastronomía se refiere, pero también disfruta mucho compartiendo lo que sabe y lo que le gusta. "La cocina italiana le gusta a los mayores y a los niños, así que es una tarea agradecida".

Después de pasar por muchos equipos, el futbolista italiano, uno de los laterales más destacados de la primera década de los 2000, ha vuelto a su ciudad, Arezzo. "Está en la Toscana y es donde se rodó La vida es bella", apunta.

Una cena de Champions

La distancia, de todas formas, no le ha hecho olvidar lo bien que comió en España. "En Madrid hay muy buenos restaurantes italianos, pero me acuerdo más de los de Valencia. Da Carlo, por ejemplo, acaba de cerrar porque el dueño se quería jubilar. Pero también fui mucho a La Strega o La Lambrusqueria".

Sobre este último, de hecho, aporta una anécdota curiosa: "Después de los partidos de Champions, más allá de la medianoche, no era fácil encontrar un restaurante abierto. Como el dueño de la Lambrusqueria, Toni, era mi amigo, le llamaba y pedía que nos esperara, que iba con otros jugadores... y nos daban una pasta y un rostbeef. ¿Para qué más?".

Amadeo Carboni formó parte, junto a Cañizares, Aimar, Baraja o Mendieta, entre otros, de una de las mejores plantillas de la historia del Valencia. Un equipo que no solo le ganó La Liga a los todopoderosos Barça y Madrid, sino que llegó dos veces a la final de la Champions. Un hito que, según el zurdo de Arezzo, no se habría sido posible sin esas cenas tan reconfortantes. "¡Sin duda! Te lo digo claramente", asegura.

"George Clooney estaba siempre allí"

El hecho de que las estrellas del equipo local frecuentaran La Lambrusqueria contribuyó a que el restaurante se pusiera de moda. Pero Carboni asegura que no fueron las únicas celebrities aficionadas a sus platos de pasta: "Cuando George Clooney vino a rodar a Valencia, estaba siempre allí".

El futbolista italiano no se considera un gran experto en cocina, pero sí le gusta hacer pasta y su marca favorita es Gentile, aunque también aprueba algunas otras que son fáciles de conseguir en España, como de De Cecco o Rummo.

Con el revival de las nonnas, en cambio, se muestra un poco más escéptico: "Yo creo que hay un poco de marketing con la pasta de las nonnas, la chimenea encendida y las manos manchadas de harina. El problema, hoy en día, es que la gente no tiene tanto tiempo para hacer pasta. Pero sí, antes las abuelas la preparaban cada día".

El truco de la carbonara

Algo que, de hecho, va mucho más allá. "Con el vino y con el aceite es igual", dice por teléfono. "El vino español es tan bueno como el italiano, y de hecho, se produce más cantidad, pero en las grandes subastas siempre hay más vinos italianos. ¡Es increíble!".

Al preguntarle por platos concretos, eso sí, defiende que cada región tiene sus propias especialidades —"El cocido madrileño no me lo como en Cadiz—" y que, en el norte, por ejemplo, suele haber más arroces, mientras que en el sur más de pasta con pescado.

La pasta carbonara, más habitual en la Toscana y en Roma, es una de sus grandes especialidades. "Hay que hacerla con guanciale, que tiene un sabor totalmente diferente, y siempre se necesita un poquito de agua de cocción para que el huevo no se haga bola", detalla. "Hay que montar el huevo y añadir un poco de agua de la pasta para que resbale".