El Celta vuelve al trabajo sin sus internacionales

Vigo

El Celta no levanta cabeza. Es difícil ganar un partido cuando tienes que marcar cuatro goles para hacerlo. Es difícil entender cómo cuando se han disputado solo 13 jornadas, un equipo ha encajado ya 24 goles y no ha sido capaz de dejar la portería a cero en ningún partido. Así es muy complicado y en buena medida los siete puntos de 39 posibles se deben a esa fragilidad defensiva del equipo de Benítez. El Celta ha firmado el peor arranque liguero de los últimos 80 años. No ha sido capaz de ganar en Balaídos después de siete partidos como local y solo ha conseguido una victoria, en el campo del colista, el Almería. El resto de puntos son los empates ante la Real Sociedad, Alavés Getafe y Sevilla.

Para encontrar una puntuación similar a la actual hay que remontarse al campeonato 2019-20, cuando el equipo dirigido entonces por Óscar García Junyent, que acababa de sustituir a Fran Escribá en el banquillo celeste, sumaba 9 puntos en la jornada trece. Esa temporada, el Celta finalizó decimoséptimo con 37 puntos. Su peor inicio histórico hasta la fecha en Primera lo protagonizó en el curso 1943-44, con una victoria, tres empates y nueve derrotas, un punto menos que en esta campaña

En medio de este mar de números, el equipo vigués vuelve este lunes al trabajo en Afouteza sin la presencia de sus seis internacionales. El noruego Larsen, los suecos Starfelt y Williot, el estadounidense Luca de la Torre, el peruano Renato Tapia y el costamarfileño Jonathan Bamba. En la sesión, presencia de los futbolistas del filial, que entrenan habitualmente con el equipo, Carlos Domínguez, Miguel Rodríguez y Hugo Sotelo. Habrá que estar pendientes de Sotelo que no pudo jugar ante el Athletic por una lesión muscular en el muslo que le obliga a trabajar a menor ritmo que sus compañeros. El Celta trabajará hasta el jueves y descansará tres días para volver el lunes y empezar a preparar el partido ante el Valencia.