El juez Pedraz se rebela de nuevo e investigará el genocidio en Guatemala
El juez de la Audiencia Nacional seguirá investigando el asesinato de siete españoles y 250.000 mayas por la dictadura de Efraín Ríos Montt en los 80
El juez Pedraz llega a Irak para investigar la muerte de Couso(CADENA SER)
La reforma del PP solo permitía investigar los hechos por terrorismo contra españoles pero Pedraz sostiene que el genocidio, la lesa humanidad y las torturas son delitos conexos y acuerda continuar con las diligencias.
Primero se negó a cerrar la investigación por la muerte del periodista español en Irak, José Couso, y ahora, el genocidio contra el pueblo guatemalteco. El juez Santiago Pedraz ha vuelto a enseñar los dientes contra la reforma de la justicia universal promovida por vía de urgencia por el Partido Popular.
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En su auto de este martes, el magistrado dice que la nueva ley solo permitiría juzgar a los responsables por terrorismo y por los asesinatos cometidos contra españoles. Pero recalca que el resto de delitos, es decir, la lesa humanidad, las torturas y el genocidio son conexos y eliminarlos de la investigación desvirtuaría los hechos. Un juez "investiga hechos, no delitos", recuerda Pedraz en su auto, quien además resalta en su favor que la Ley Orgánica del Poder Judicial faculta a los magistrados a perseguir delitos conexos, por lo que a su entender está legitimado para continuar con el caso en toda su dimensión.
El pogromo maya y el asesinato de siete españoles
Esta causa surge a raíz de la querella presentada en 1999 por la premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú. Denunció que entre los años 1978 y 1986, el gobierno guatemalteco practicó un genocidio sistemático contra la población maya, provocando alrededor de 250.000 víctimas entre los indígenas, según las estimaciones. Las mujeres sufrieron en especial al gobierno genocida, ya que 1.465 fueron violadas, convertidas en esclavas sexuales. Los testimonios recogidos por Pedraz en sus dos viajes para interrogar a testigos son estremecedores. Los testigos relataron que vieron cómo abrieron a mujeres en canal para extraerles los fetos y otras fueron esterilizadas de forma forzosa.
Durante el pogromo maya también fueron asesinados siete españoles. Tres en el asalto a la embajada española en Guatemala el 31 de enero de 1980, y otros cuatro sacerdotes tiroteados en 1980 y 1981.
Entre los imputados figuran el exgeneral golpista Efraín Ríos Montt, que gobernó el país centroamericano entre marzo de 1982 y agosto de 1983, y los exgenerales Benedicto Lucas García, Ángel Aníbal Guevara y José Humberto Mejía, así como Germán Chupina Barahona y Pedro García Arrendondo. En la querella también estaban incluidos el expresidente Romero Lucas García (que murió el 29 de junio de 2006 en Venezuela) y el exministro del Interior Donaldo Álvarez Ruiz, prófugo de la justicia desde diciembre de 2004.
