Asuntos Internos desvela los favores a los policías implicados en la trama de Gao Ping

La Cadena SER ha tenido acceso al informe de Asuntos Internos que la dirección de la Policía Nacional ha elaborado sobre los policías presuntamente implicados en la trama de corrupción de Gao Ping. Son siete policías nacionales y locales investigados y un cabo de la Guardia Civil. La acusación más grave que aparece en estas conclusiones es contra un agente de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana que según este informe facilitó a un ciudadano chino imputado en la trama "información confidencial obtenida de las bases de datos policiales".

El informe lo ha elaborado Asuntos Internos de la Policía Nacional y consta de 239 páginas. Hay seis policías nacionales investigados, dos policías locales y un cabo de la Guardia Civil. La acusación más grave que recoge este informe es contra un agente que actualmente es Jefe del Servicio de Seguridad de Edificios de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de Madrid. Se llama Manuel Patricio Rodriguez San Román y Asuntos Internos le acusa de "haber facilitado información confidencial obtenida de las bases de datos policiales" a un ciudadano chino imputado en la trama de Gao Ping, Yongping Wu Liu, cuando era jefe de la Comisaría de Vallecas (Madrid). El informe policial incorporado al sumario del caso Emperador revela también que este policía agilizó una licencia de veladores para la instalación de una terraza de verano. A cambio recibe de uno de los imputados en la trama de Gao Ping regalos como comidas, jamones, cajas de vino y entradas para los toros y para partidos de fútbol del Real Madrid.

Otro de los comisarios investigados es Carlos Salamanca, jefe del puesto fronterizo de Barajas. El informe de Asuntos Internos dice que Salamanca mantiene una "extraordinaria relación de amistad" con el imputado YongPing Wu Liu y que solo "en contadas ocasiones" recurre a él para solicitar algún tipo de gestión. En concreto se relatan dos ocasiones en las que YongPing Wu Liu solicita ayuda para dos ciudadanos chinos retenidos en el aeropuerto. Según el informe el comisario intercede en una ocasión para no repatriar a una mujer que no tiene la documentación legal. En el otro caso otro ciudadano chino es repatriado. A cambio recibe un jamón y una caja de vinos.

Con Gao Ping solo tiene contacto dos de los policías investigados. Uno de ellos es Federico Sánchez de Frutos ahora ya en segunda actividad y en su día jefe del Grupo 5º de la Brigada de Extranjería de Madrid. Por gestiones referidas a documentación Gao Ping le organiza un viaje a China para su mujer. El otro policía investigado con relación con Gao Ping es Ángel Luis olmedo Ovejero, Jefe de la Brigada de Extranjería y Documentación de Madrid que media en gestiones relativas a la documentación de extranjeros sobre todo con YongPing Wu Liu. A cambio recibe un jamón en Navidad, un bolso para su mujer y entradas para el Real Madrid.

En cuanto a los dos policías locales investigados el informe policial resalta gestiones para anular multas o inspecciones en locales de la competencia con el objetivo "de encontrar un procedimiento sancionador o concluir con un decreto de cierre".

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A modo de conclusión el informe finaliza que algunos ciudadanos chinos implicados en la trama "buscan la connivencia de funcionarios destinados en puntos estratégicos dentro de distintos ámbitos administrativos a los que recurrir en función de sus intereses o simplemente para beneficiarse de un trato de favor a la hora de realizar diferentes trámites. Como quiera que la mayor parte de sus intereses radican en la localidad de Fuenlabrada la mayor parte de estas relaciones convergen en funcionarios destinados en este municipio. Tal es así para tratar de controlar las inspecciones realizadas en los locales de la competencia o para controlar el tráfico en las inmediaciones de sus negocios. Para tratar de solventar cualquier trámite policial cotidiano o relativo a la documentación de extranjeros cuentan con el favor de funcionarios destinados en la Comisaría de Fuenlabrada. En caso de que en dichas comisarías no pudiesen resolver esos trámites acudían a funcionarios de la Brigada de Extranjería y Documentación. En temas referidos al tráfico se valían de agentes de la guardia civil. De interés estratégico también resulta el puesto fronterizo de Madrid Barajas, lugar donde podrían plantearse problemas de entrada de ciudadanos chinos que podrían ser resueltos por funcionarios allí destinados, resultando de especial interés un trato fluido con el responsable de dicho puesto fronterizo".