Los anuncios económicos de Rajoy

De todo lo anunciado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en su discurso, sólo dos cosas tienen un efecto directo para empresas o contribuyentes. Y se trata de efectos bastante limitados.

Primero, una cotización de sólo 100 euros a la Seguridad Social cuando la empresa contrata a un nuevo trabajador con caracter indefinido, pero con condiciones estrictas. La empresa no debe haber despedido a ningún trabajador en los seis meses anteriores. No vale pues sustituir a un empleado por otro con menos coste de Seguridad Social. Además, ese nuevo asalariado deberá permanecer en la empresa durante, al menos, tres años. La cotización plana de 100 euros se aplicará durante dos años. Luego, la empresa cotizará como el resto.

Se trata de una medida que no provocará un descenso en la recaudación de la Seguridad Social porque las empresas seguirán cotizando igual que ahora por los trabajadores que ya tienen. Esta medida trata de dar satisfacción, aunque de manera muy limitada, a la petición permanente de la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) de que bajen las cotizaciones sociales.

Para entender el efecto que esto puede tener en el conjunto de la economía, echamos mano a los datos del año pasado. Si España fuese la empresa afectada, no habría podido utilizar la tarifa plana de 100 euros en ningún caso, porque en nuestro país no se ha creado empleo indefinido. Al contrario: en 2013 se han destruido 269.000 empleos fijos. A esa empresa, España, no se le permitiría acogerse a la tarifa plana.

En segundo lugar. A partir de la reforma fiscal un trabajador que gane menos de 12.000 euros no pagará por el IRPF. Es una rebaja fiscal menor de lo que puede aparentar. En la actualidad, un trabajador no tiene que pagar nada en el Impuesto sobre la Renta, cuando gana 9.231 euros anuales, o menos. Pero también puede librarse de pagar en el IRPF con ingresos mayores, si tiene algún hijo o padres a su cargo. Por ejemplo, un trabajador que gane 12.000 euros anuales, a los que ha hecho referencia Rajoy, ya no tiene que pagar nada si tiene un hijo menor de tres años. En el IRPF toda persona tiene una deducción de 5.151 euros, a las que se suma otra de 4.080 euros si las ganancias las ha obtenido por el trabajo. A ello se pueden ir sumando deducciones por hijo. Por eso, el límite para no tener que pagar a Hacienda es diferente para cada caso personal.

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