El PSOE quiere proteger del desahucio a las familias que ganen menos de 18.600 euros

La propuesta del PSOE apuesta por introducir un umbral de renta para que las familias con menos recursos no puedan ser desahuciadas. También incorpora medidas para proteger la vivienda particular en los casos de impago de créditos y quiere poner fin a los desahucios en los que las víctimas tienen que seguir pagando una parte de la hipoteca.

Evitar que se produzcan los desahucios y, si no es posible, que los afectados no estén tan desprotegidos. Son los dos objetivos de la proposición de ley contra el desahucio, la insolvencia y el sobrendeudamiento familiar que registrará el PSOE en el Congreso. Según datos del Consejo General del Poder Judicial, en España ha habido unos 400.000 ejecuciones hipotecarias entre los años 2006 y 2011.

Para ello el texto apuesta por tener en cuenta la renta de los afectados. Si sale adelante, se impedirá el desahucio de las familias que ingresen al año menos de 18.637,85 euros. Actualmente la ley no incluye la renta familiar como uno de los factores que impiden los desahucios. Los socialistas también proponen que no se puedan desahuciar aquellas familias que dedican más del 50% de sus ingresos al pago de la hipoteca.

Otra de las medidas incluidas en esta proposición de ley trata de proteger la vivienda habitual de aquellas personas que no pueden hacer frente a la devolución de un crédito. Ésta es una medida que, junto a otras incluidas en la ley, pretende fomentar que las personas que no han podido devolver un crédito puedan rehacerse económicamente.

Límites a los plazos hipotecarios

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Otro de los cambios que propone el PSOE tiene que ver con la concesión de hipotecas. Quieren limitar a los 30 años el plazo máximo para devolver el crédito y que el dinero concedido no supere el 80% del valor de tasación de la vivienda.

La propuesta socialista propone que cuando se conceda una hipoteca, el valor de concesión sea el mismo que el valor del desahucio. De aprobarse se evitaría que las familias que sean desahuciadas, tengan que seguir pagando una parte de la hipoteca, además de quedarse sin casa.

La ley incorpora otras medidas como una disminución de los intereses de demora o dar mayor independencia a las sociedades tasadoras y dar más fuerza a los pactos entre las partes, en casos de impago.