El PSdeG y el BNG renovarán sus ejecutivas
Las dimisiones de Quintana y de Touriño han abierto un proceso en ambos partidos
La dimisión de Anxo Quintana y de toda la ejecutiva del bloque ha propiciado un proceso que finalizará el próximo 10 de mayo en una asamblea general que decidirá el futuro del BNG y quiénes serán los nuevos referentes del nacionalismo gallego. Tras la reunión del Consello Nacional, que duró más de seis horas, todos apelaron a la unidad para trabajar en un nuevo BNG y para buscar un nuevo líder que permita al nacionalismo salir airoso de su derrota más amarga en las urnas.
Más información
- La dimisión de la ejecutiva propicia la unidad del BNG para renovar la dirección en una asamblea por delegados
- Quintana apuesta por una "relación diferente" con el PSdG de "respeto mutuo"
- Dimite la ejecutiva del BNG, con Anxo Quintana al frente
- Cuatro acuerdos unánimes en el pleno del Congreso tras intensas negociaciones
- Los socialistas de Vigo llegan a las manos por la nueva ejecutiva
- Feijóo señala que "no vinimos a derrumbar lo que hicieron bien" los anteriores gobernantes
Al respecto, el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, ha manifestado su "mayor y absoluto respeto" por la decisión de la Ejecutiva del Bloque Nacionalista Gallego (BNG) de presentar su dimisión en pleno. "Quiero desearles que rápidamente encuentren la mejor dirección y a Anxo Quintana (portavoz del grupo nacionalista) de forma muy particular desearle lo mejor", ha comentado Feijóo.
Por su parte, el Comité Nacional galego del PSdeG ha aprobado en una reunión de casi siete horas la fecha del 25 de abril para la celebración del congreso extraordinario del partido. Un congreso obligado para elegir una nueva dirección tras la dimisión de Emilio Pérez Touriño.
El PSdeG puso fin a su Comité Nacional con una amplia participación crítica de las bases. Mantener las alcaldías y las diputaciones y volver al Gobierno gallego son los puntos fundamentales que sustentan el nuevo proyecto que pretende impulsar el PSdeG y, en este sentido, se defendió la "necesidad" de "gobernar en coalición" y se evidenció que "los pactos locales funcionan bien, aunque la alianza con el BNG no haya funcionado en la Xunta".
