El Gobierno exige a la organización de Miss Cantabria que no discrimine a las madres

La secretaria general de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, ha pedido a los organizadores de Miss Cantabria que eliminen de las bases del certamen la cláusula, "absolutamente discriminatoria", que establece como requisito para presentarse el no tener hijos. Esta condición ha supuesto que la ganadora de este año, Ángela Bustillo, haya sido desposeída del título, en una decisión que la afectada ya ha anunciado que llevará a los tribunales. La ex Miss ha asegurado en la SER que nunca pensó que iba a "tener tanto apoyo".

Murillo ha explicado que el Gobierno trasladará por carta esta exigencia a la firma responsable del concurso, Propulsora Montañesa S.A., ya que considera que se trata de un "caso clarísimo de discriminación directa y ninguna entidad privada está exenta de cumplir la ley".

Según la secretaria general, al excluir del certamen a una mujer por ser madre se produce la doble discriminación de dejar fuera a una persona porque se da por hecho que su cuerpo nunca podrá volver a ser el mismo después de la gestación y al establecer que sólo la mujer puede encargarse del cuidado de un hijo.

"Están penalizando la maternidad como si fuera un déficit para el funcionamiento profesional de la mujer, lo que en ningún caso está justificado", señala Murillo, quien ha subrayado la responsabilidad que tienen los concursos de belleza cuando tratan de forma diferente a las mujeres, porque eso redunda de forma negativa en la imagen social y en la inseguridad de la mujer.

Entrevista en La Ventana

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La ex Miss ha asegurado en La Ventana con Gemma Nierga que se encontraba muy sola en su lucha hasta que los medios de comunicación se han volcado con su caso. Reconocía que conocía las bases del concurso pero que le parecía una "norma absurda y anticuada" y que no se iba a tomar en cuenta como otras que tampoco se aplican.

Bustillo habló de su hijo con mucho cariño, Roberto de tres años, cuando Gemma Nierga le preguntó por él. "Ya querrían todos los que están hablando de tener un niño como el mío". Y aseguró que su reivindicación era justa porque los tiempos cambian: "Hasta la Constitución se va a cambiar para tener una Reina", ha recordado.

Ha asegurado que todo ha cambiado desde que su caso saltó a los medios de comunicación, a los que nunca tendrá tiempo para "agradecer lo suficiente lo que han hecho". Aseguró que "lo que al principio eran críticas, ahora hasta la gente por la calle me para" y contó cómo entró en un bar hace unos días y, mientras en la televisión contaban su caso, fue reconocida y la gente se acercó para apoyarla.

Aunque no confía en que le "devuelvan el título", espera que su lucha "sirva para cambiar no sólo las bases del concurso sino todos los contratos igual de machistas", dijo.