Líbano comenzará esta semana a limpiar el vertido de más de 10.000 toneladas de crudo
La ONU compara el desastre con el vertido el carguero Erika en la costa francesa en 1999
Líbano comenzará a limpiar el martes las entre 10.000 y 15.000 toneladas de crudo que fueron vertidas al Mediterráneo y anegaron sus costas después de que Israel bombardeara una planta energética hace un mes. La limpieza se suspendieron por los combates entre Israel y Hezbolá, pero el bloqueo marítimo y aéreo israelí continúa dificultando la llegada de equipos y expertos.
"Comenzaremos las operaciones de limpieza mañana mismo, pero el alto el fuego no tiene nada que ver. El bloqueo continúa, así que aún no podemos adentrarnos en el mar", dijo el ministro de Medio Ambiente, Yacub Sarraf. "Aún estamos esperando que se levante el embargo", añadió.
Más información
- Israel asegura que la ONU podría tomar el control del sur de Líbano "en una semana o diez días"
- 40 países discuten las condiciones de la misión de la ONU en Líbano
- Bush asegura que Hezbolá ha perdido
- El Gobierno aprobará el despliegue español en la misión de la ONU en Líbano
- Entra en vigor el alto el fuego entre Israel y Hezbolá tras una jornada de intensos combates
- Annan certifica que el alto el fuego entre Israel y Hezbolá se está cumpliendo
Sarraf ha calificado el vertido como la mayor catástrofe medioambiental en la historia de Líbano y el Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas (UNEP) la ha comparado con el desastre que el carguero Erika provocó en la costa francesa en 1999, cuando vertió 13.000 toneladas de crudo al Atlántico.
La aviación israelí dañó los tanques de almacenaje de la planta Jiyeh del sur de Beirut el 13 y el 15 de julio. Sarraf dijo que las imágenes de satélite mostraban que costaría al menos 100 millones de dólares limpiar la costa y que, cuanto más se retrasara, habría más áreas afectadas y la limpieza sería más difícil.
Dos expertos de la ONU llegaron a Siria el 8 de agosto para evaluar el vertido que ha alcanzado 140 kilómetros de las costas libanesa y siria. Los expertos de la Unión Europea llegaron la semana pasada. El vertido amenaza a especies marinas como el atún rojo y a tortugas como la verde, que está en peligro de extinción en el Mediterráneo.