Ordenan la evacuación de Nueva Orleans ante la llegada del 'Katrina'
El huracán alcanza la fuerza máxima, tras dejar siete muertos en Florida
Las autoridades locales de Nueva Orleans, en el estado de Luisiana, han ordenado la evacuación obligatoria e inmediata de la ciudad ante la llegada del huracán 'Katrina', que en la jornada de hoy ha alcazado el nivel máximo de fuerza.
"Nos enfrentamos a un huracán al que la mayoría tenemos miedo", ha asegurado el alcalde de la ciudad, Ray Nagin, quien hizo un llamamiento para que no cunda el pánico pero, al mismo tiempo, pidió al medio millón de ciudadanos que se tomen "muy seriamente" la orden de evacuación.
Más información
- 'Katrina' avanza con fuerza catastrófica hacia Nueva Orleans
- La rotura de un dique amenaza con inundar Nueva Orleans
- EE UU recurrirá a las reservas estratégicas de petróleo para paliar los efectos del 'Katrina'
- El peligro de epidemias y saqueos se extiende en Nueva Orleans
- Se pagó champán y vídeos porno con fondos de ayuda a las víctimas del 'Katrina'
- El huracán Ernesto amenaza al Caribe con vientos de 120 kilómetros por hora
- El huracán Katrina recobra fuerza tras dejar siete muertos en Florida
Para facilitarla, todas las autopistas estatales que discurren por la zona afectada sólo se permite la circulación en sentido norte, ya que es desde el sur desde donde llegan los vientos huracanados.
Y es que el huracán 'Katrina' ha alcanzado este domingo la categoría 5 en la en la escala de Saffir-Simpson, lo que se atribuye a un huracán con capacidad de causar daños catastróficos.
Con esta misma potencia, el huracán Charley pasó a ser el año pasado el segundo más costoso de la historia y causó la muerte de 27 personas.
Tras dejar ocho muertes en Florida, el terrible huracán 'Katrina' se dirige con una velocidad de doce kilómeros por hora, hacia el oeste-noroeste y los meteorólogos prevén que mañana mismo pueda volver a tocar tierra en Nueva Orleans. Por ahora se teme lo peor, ya que los vientos superarán los 256 kilómetros por hora.
Las autoridades del país insisten en que es preciso extremar las precauciones pero todavía, aseguran, se está a tiempo de prevenir una catástrofe ya que la potencia no es sinónimo de destrucción.
