Buen humor en la concentración del Madrid, Ronaldo: "Pegarme un tiro para no seguir sufriendo"

"Ya estoy listo para que llevéis mi cadáver. Pegarme un tiro para no seguir sufriendo", gritaba Ronaldo montado en el carrito que le trasladaba al centro de recuperación tras el entrenamiento matinal del Real Madrid en Montecastillo (Cádiz). Luis Figo se incorpora este jueves a la concetración merengue después de disputar la Eurocopa

El futbolista brasileño "estaba muerto". Este miércoles, volvieron las palizas físicas del técnico José Antonio Camacho y "Ronie", no obstante, no pierde el humor ni en los peores momentos.

Después de dos días de relax, con sesiones vespertinas de balón, en el sexto día se intensificó la preparación del Real Madrid. Los 3,1 kilómetros a ritmo fuerte de la sesión matinal destrozaron a más de uno.

Ronaldo ya había admitido en el segundo día de trabajo en Montecastillo que la pretemporada es "la peor fase del fútbol" y hasta había dudado de si la podría acabar al ritmo que marca Camacho. "Lanzaré mi apuesta de goles más tarde, si sobrevivo", dijo.

Este miércoles volvieron sus resoplidos. Las caras de sufrimiento que acompañan al brasileño mientras completa cada kilómetro.

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Si hay que hacer caso al preparador físico, Fernando Gaspar, que afirmó que "es bueno que Ronaldo resople porque significa que está haciendo un desgaste", entonces Ronie está trabajando bien y quemando más calorías que nunca.

Tanto, que una vez finalizada la sesión matinal fue el primero en llegar a la zona de traslado de los jugadores. Estaba deseando el final de su particular suplicio y empapado de sudor dijo al conductor del carrito: "Ya estoy listo para que llevéis mi cadáver", e ironizó con los medios de comunicación: "Pegarme un tiro para no seguir sufriendo".

Así es Ronaldo. El jugador que horas más tarde sonreía y disfrutaba cada segundo en los amenos partidos a medio campo en los que de nuevo daba un recital goleador. Hasta cuatro tantos hacía cada uno de un estilo. Se enfadaba y se exigía cuando Iker Casillas le sacaba algún mano a mano mostrando su agilidad bajo palos.

Por la tarde, Camacho intentó dar diversión a sus futbolistas. 20 minutos de 'rondos' dinámicos, en los que el jugador al que le interceptaban la pelota cambiaba de grupo al centro para recuperarla.

Dividió a la plantilla en tres. Con peto naranja jugaron Casillas, Samuel, Roberto Carlos, Miñambres, Núñez, Portillo y Morientes. Con peto azul César, Bravo, Pavon, Solari, Mejia, Guti y Ronaldo. Sin peto uno de los porteros anteriores más el guardameta Diego como jugador de campo con Helguera, Salgado, Celades, Zidane y

Raúl. Era un rey de la pista. El ganador permanecía en el campo y los partidos acabaron en el mismo número de victorias para cada equipo.

La mayor ovación del público se la llevó Casillas. Realizó en un segundo tres intervenciones de puro reflejo. Salvó bajo palos un testarazo de Raúl, el rechace lo enganchó Helguera que se topó con Iker todavía en el aire antes que desde el suelo se luciese de nuevo con un disparo a bocajarro de Celades.

En la grada se repetía el arte andaluz bajo un intenso calor. Las temperaturas han aumentado considerablemente y Camacho retrasó media hora la sesión de tarde. Un aficionado gritó: "`Camacho qué fresquito hace, vamos a alargar el entrenamiento dos horas más!".

Mientras, Beckham, segundo lesionado de la pretemporada, repetía trabajo de recuperación con los fisioterapeutas y presenciaba la última parte del entrenamiento tras ser asediado por varios aficionados que esquivaron en la zona de la piscina el amplio cordón de seguridad.

Con diversión acabó una intensa jornada. Mañana, jueves, se repite doble sesión. A las 9.30 horas de la mañana entrenamiento y por la tarde partido contra el Chiclana, equipo de Tercera división.

Será una "pachanga" algo más seria que la del martes con el Xerez juvenil, en la que el técnico llegó a mezclar a los jugadores de los dos equipos. Servirá para un nuevo estudio de Camacho antes del primer partido serio de pretemporada, el domingo ante el Benfica.

Pero el protagonismo de este ya tiene nombre: Luis Figo. El portugués es el último en incorporarse a la pretemporada de Montecastillo tras llegar a la final de la Eurocopa con su selección. Le espera un duro plan de trabajo diseñado por Camacho y Gaspar. Un plan para que atrape tono físico lo antes posible y se reincorpore a un grupo que muestra claras mejorías en su físico.