Maragall anuncia la salida de Carod del Govern, pero le deja la puerta abierta para que regrese

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, ha anunciado que Josep Lluis Carod-Rovira dejará el Gobierno de Cataluña tras comparecer ante el Parlamento catalán para explicar su entrevista con ETA. Maragall ha dejado la puerta abierta a un posible regreso al Govern del líder de ERC.

Maragall se ha referido a Carod como "actual conseller y desde esta tarde simplemente diputado". El presidente de la Generalitat, que ha comparecido por sorpresa al inicio de la sesión del Parlament, ha reiterado a Carod la exigencia de que pida disculpas por sus contactos con ETA.

"Hoy, Josep Lluis Carod debe pedir disculpas al Gobierno y al pueblo de Cataluña por haber utilizado su nombre en una iniciativa personal. Espero que lo haga", ha dicho Maragall. Además, el president ha asegurado que Carod que "debería hacer llegar su valoración sobre los contactos que ha mantenido a las instituciones españolas, porque, tanto si nos agrada como si no, quien las gobierna representa a un pueblo que ha sufrido (el terrorismo). Eso es lo que exijo al aún conseller y desde esta tarde simplemente diputado Carod."

MEDIDAS LEGALES CONTRA EL USO DEL CNI

Además, Maragall además ha anunciado que la Generalitat está estudiando la posibilidad de emprender medidas legales por el uso "partidista" de las informaciones del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) sobre la reunión de Carod con dirigentes de ETA con la intención de, "más allá de pedir responsabilidades políticas", dirimir si existió delito en la "ruptura de las normas políticas democráticas".

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En su comparecencia ante la Diputación Permantente del Parlament, Maragall instó al presidente del Gobierno, José María Aznar, a someterse a una comisión de investigación similar a la que se ha sometido el primer ministro británico, Tony Blair, por el 'caso Kelly'. Según Maragall, "no se puede aprovechar la buena intención de Carod para poner en peligro el dispositivo antiterrorista por unos votos".

En el caso que los servicios jurídicos no encuentren materia de denuncia en los tribunales, señaló que el Gobierno catalán "denunciará políticamente" el "aprovechamiento" de la "sensibilidad" de la ciudadanía contra la violencia terrorista por parte del Gobierno del PP.

AZNAR: "VISIÓN PATÉTICA, CORTA Y MISERABLE"

El presidente catalán fue contundente: "Prefiero las buenas intenciones de Carod a la pasividad" del Ejecutivo central y denunció que hay quien "prefiere a ETA viva como un espantajo para justificar esta pasividad".

En este sentido, preguntó "por qué no se detuvo" a los etarras que se reunieron con Carod, "por qué no se avisó a las autoridades francesas, por qué se puso en peligro la vida de los topos por motivos electoralistas" haciendo pública esa información, más aún "coincidendo con el congreso de las víctimas del terrorismo". "¿Creen que los ciudadanos están ciegos?", preguntó.

No obstante, Maragall lamentó que Carod "no se diera cuenta de que ETA no es lo que era y que ha ayudado" a establecer en la ciudadanía el estado psicológico que provocó la ruptura de la tregua en febrero de 2000. Además, recordó que la reunión se hace pública "a las puertas de unas elecciones y no ingenuamente para conseguir la polarización de la vida política" y "da a Aznar la posibilidad de imponer su visión patética, corta y miserable de las Españas".

Maragall ha dejado las puertas abiertas a un posible regreso de Carod al Gobierno catalán siempre que "haga las cosas bien" y respete las instituciones.