La nueva responsabilidad
"A nosotros, a cada uno de nosotros, nos debemos la demostración de que no necesitamos un policía en cada esquina para cumplir normas", la opinión de Carles Francino.

undefined
Madrid
Bienvenidos un día más a esta ‘Ventana de la resistencia y el confinamiento’. Hoy hace justo una semana iniciamos la cuenta atrás para que los niños salieran a la calle. Hoy arrancamos otra esperando el turno de los adultos y tocando madera para que, en esta nueva etapa, yo diría de nueva responsabilidad, estemos a la altura.
Creo que no deberíamos ser catastrofistas a pesar de algunas imágenes que se vieron ayer, pero tampoco restarle importancia. Puede entenderse que el pistoletazo de salida -nunca mejor dicho- para millones de familias provocara algunas situaciones indeseables, nada recomendables en forma de aglomeraciones puntuales; además era domingo. Pero hoy ya no hay excusas para seguir teniendo muy, muy claro, que nos la jugamos todos; que las decisiones que tomemos no sólo nos afectan a nosotros o a nuestras familias, sino que forman parte de una cadena. Y esa cadena puede romperse por bajar la guardia o por pasarse de listos.
Al gobierno, a las autoridades, a eso que llamamos colectivamente “los políticos” tenemos derecho a exigirles no sólo eficacia, sino que transmitan confianza; o por lo menos que guarden las formas. Que mira que les cuesta; lo uno y lo otro.
Pero a nosotros, a cada uno de nosotros, nos debemos la demostración de que no necesitamos un policía en cada esquina para cumplir normas. Si aprobamos esto con nota no sólo acabaremos antes -que también- sino que nos habremos cargado de autoridad moral para ser más exigentes. Con todo y con todos.