Una historia de amor
Sus historias propias, sus experiencias, su mirada, y cualquier asunto de actualidad que se nos cruce y merezca ser comentado conforman el ADN de la radio
Madrid
No les quiero atosigar con declaraciones de amor eterno, más que nada para que no convirtamos este día en una especie de San Valentín anticipado, pero tampoco les quiero ocultar que es el mejor martes y trece que recuerdo en bastante tiempo.
Básicamente, porque celebramos el día mundial de la radio; también porque nuestra campaña de “sin respeto, no hay juego”, que hoy vive su puesta de largo, está tirando como un cañón; pero sobre todo porque hoy compartimos espacio con los oyentes, aquí en los estudios de la Cadena SER, en Madrid.
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Cadena Ser
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Como siempre que hacemos algún programa de cara al público, insisto en que esa presencia, ese contacto, ese ponernos cara y tocarnos… es la mejor gasolina que tenemos. Y en justa correspondencia esta tarde les vamos a regalar música en directo, con Rozalén y Pedro Guerra, a partir de las 18:00; la bendita locura de “Todo por la radio”, a partir de las 17:00 –incluido el gran desafío de Iturriaga–, y a partir de este momento con la presencia activa de algunos de esos oyentes como cafeteros de “La ventana”.
Sus historias propias, sus experiencias, su mirada, y cualquier asunto de actualidad que se nos cruce y merezca ser comentado conforman el ADN de la radio; y de la vida. La suya y la nuestra.