PSOE: la hora de la verdad

Madrid

Dicen que el movimiento se demuestra andando. Bueno, pues al PSOE se le acaba de presentar una oportunidad pintiparada para pegar un hachazo –como en el ciclismo– y marcar diferencias con el PP en su compromiso contra la corrupción. La decisión del Supremo de abrir causa contra Chaves y Griñán por el caso de los ERE va a poner a prueba ese compromiso, y va a aclararnos si los socialistas remolonean o aplican lo que la presidenta andaluza, Susana Díaz, ha dicho hace sólo unos días:

“Cualquier persona que resulte imputada por el Supremo o por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía va a tener que dejar el escaño. Y esto que anuncio aquí se lo voy a explicar yo personalmente a ellos”..

Pues más claro el agua. Es verdad que técnicamente Griñán y Chaves no están todavía imputados pero eso queda solo pendiente de un formulismo, de un trámite. O sea que, si finalmente se confirma, como parece... ¿qué pasará con ellos? Pues ahí estamos. Y también es mala suerte, por cierto –o buena, según se mire–, pero hoy precisamente Pedro Sánchez ha firmado un convenio con Transparencia Internacional que convierte al PSOE en el primer partido español que asume las exigencias de esta organización. Y eso incluye, entre otras cosas, limitar los privilegios jurídicos y judiciales de los aforados y prohibir los indultos cuando se trata de condenas por corrupción. En ese mismo convenio también se habla de listas abiertas, de prohibir las donaciones de empresas, de no aceptar que los bancos condonen deudas a los partidos… Así que, al menos en toda esta materia, la letra está bien puesta y está muy clara. Ahora falta que suene la música. Y eso le interesa no sólo al PSOE, que también, eso nos interesa a todos.