¿Quién decide en Navarra?

Ayer Ferraz comunicó al PSN que no debe presentar una moción de censura contra Yolanda Barcina para no contaminarse con los votos de Bildu. La decisión nos suscita al menos tres polémicas. Una sobre la condición de apestada de una formación política, Bildu, tan legal como el resto de las que ocupan el parlamento navarro. ¿No deseábamos que ese mundo hiciera política? La segunda, sobre la opción elegida. ¿Considera el PSOE que para evitar incomodidades es mejor mantener un gobierno que consideran contaminado por la corrupción? Resulta extraño que el PSOE siga pidiendo la dimisión de Barcina y no haga posible su relevo mediante un instrumento que está en sus manos.

Y la tercera polémica, la fundamental, sobre quién decide en Navarra. Parece evidente que son sus representantes, votados en las urnas, quienes deban hacerlo. Se lanzan señales contradictorias cuando un partido abre procesos de primarias para elegir representantes que después harán lo que les mande la dirección federal. El PSN tiene la palabra esta tarde. Pero aunque libérrimamente opte por no presentar la moción ya parecerá que solo obedece órdenes.