Wert insiste en que el Gobierno sustituirá las subvenciones al cine por desgravaciones

El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha inaugurado esta mañana el III Encuentro Anual de Productores Audiovisuales Españoles, en el que se ha referido al estado del sector del cine. Como ya había avanzado en su primera comparecencia parlamentaria, Wert ha incidido en que las subvenciones son un modelo superado e inviable actualmente, y que las desgravaciones también son ayudas, que servirán para dinamizar un sector que da trabajo a 100.000 personas y supone un 1% del PIB español.

Wert ha insistido además en la importancia de la nueva regulación fiscal que se hará a través de la Ley de Mecenazgo, que, según ha anticipado, creará un incentivo fiscal que irá "mucho más allá" del 18 por ciento actual. El ministro ha planteado que la necesidad "obliga a repensar" el esquema de subvenciones en el cine español, "más allá de si era suficiente, fomentaba" la creación o "estaba bien distribuido".

A la hora de reflexionar sobre la situación actual de la industria cinematográfica y audiovisual española en un contexto de crisis, Wert ha subrayado que no se puede "dejar fuera esta reflexión honrada sobre lo que ha dado de sí. Desde este examen de conciencia, creo que lo que ha sucedido en la historia reciente del cine español como industria, no como arte, si atendemos a qué capacidad industrial hemos sido capaces de poner en pie y a los resultados comerciales, yo creo que todos estaríamos de acuerdo en que el sistema no ha dado unos frutos extraordinarios hasta ahora, y queremos un sistema que nos permita avanzar", ha señalado en el encuentro organizado por FAPAE.

Wert ha valorado positivamente la entrada en vigor en esa dimensión regulatoria de la ley antidescargas, "importante pues ayuda a dar seguridad a la propiedad intelectual de los creadores", algo que ayudará mucho a dotar al sector de la tan pedida "previsibilidad, certeza y marco para trabajar con garantías".

Más incentivos fiscales

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Ese elemento planteado por Wert, el de conceder un "incentivo fiscal significativo que vaya mucho más allá del 18 por ciento vigente a través de la ley de mecenazgo, y que sea un elemento dinamizador del interés industrial en la producción audiovisual", "es algo esencial", ha subrayado. El ministro ha admitido las "dificultades" del momento actual, y ha recalcado la complejidad de "arbitrar" entre necesidades y recortes. "Aquí ha predominado el enfoque de la colaboración con subvención, pero no ha sido el único. Podemos vernos en la administración como un gran productor, un 'súper Cerezo', pero hay otras posibilidades: crear un marco fiscal beneficoso para hacer crecer el interés en la rentabilidad empresarial de la producción audiovisual, y crear un marco regulatorio en el cual actuar como facilitador de la convergencia de las industrias audiovisuales", ha resumido.

Finalmente, ha abogado por "dejar de lado el recelo hasta ahora predominante y empezar a entender que de verdad el audiovisual es una sola industria, que supone el 1 por ciento del PIB prácticamente, más de 8.000 millones de euros y cerca de 100.000 empleos". Además, ha agregado que no es capaz de concebir una "marca España separada de la imagen que transmitimos a través de nuestro audiovisual". "Hay plena conciencia de la importancia del sector material y simbólica", ha sentenciado.

Pedro Pérez asegura que "el Estado invierte una caspa"

Por su parte, el presidente de FAPAE, Pedro Pérez, ha afirmado que el Estado "invierte una caspa" en el cine español, y ha puesto como ejemplo Francia, donde el dinero público llega a los 400 millones, "ocho veces más". Dicho esto, ha reclamado "acabar con la incertidumbre en el sector y conocer las reglas del juego, y ha avanzado que los productores "pondrán todo de su parte y las diferentes pantallas, sea cual sea su tamaño, nunca estarán vacías". Por último, ha hablado de RTVE: "Es una locura incomprensible que los partidos no se hayan puesto de acuerdo en nueve meses para que RTVE tenga un rumbo. No puede ser que sea un consejo de administración quien dirija, pues lo más barato del mundo es nombrar un presidente, y eso debe resolverse de manera inmediata".