En marcha las obras del nuevo módulo de atletismo de Larrabide

Pamplona

El nuevo módulo de atletismo del Estadio Larrabide ya está en marcha desde el pasado mes de diciembre. Con una inversión total de 4,66 millones de euros, el proyecto busca mejorar las infraestructuras deportivas en pleno centro de Pamplona y ofrecer espacios de entrenamiento más acordes para los y las atletas. Con las obras se sustituye al antiguo graderío del estadio por un edificio de dos plantas y dos entreplantas, con una superficie total de 4.267,46 m². En la planta baja se dispondrán cinco calles de carrera de 60 metros, con espacios específicos para salto de longitud, triple salto y altura. Además, habrá un área de calentamiento que rodeará las pistas y gradas con acceso exterior. También se habilitarán aseos para público y atletas, incluyendo espacios adaptados y almacenes para jueces y juezas, así como para el material deportivo.

En la primera planta, el módulo contará con un gimnasio e incluirá una pista de entrenamiento de lanzamiento de jabalina y un mínimo de dos aros de entrenamiento de lanzamiento. Además, dispondrá de una sala multifuncional y varios espacios técnicos, entre ellos una sala de foto-finish con visibilidad directa de la pista exterior, una sala de megafonía y otra de reuniones.

El edificio dispondrá de un cuarto de instalaciones para albergar los sistemas proyectados, garantizando un uso eficiente de los recursos energéticos. También se han planificado núcleos de comunicación entre las plantas para optimizar la accesibilidad y evitar la pérdida de espacios de paso. Se habilitará un cuarto de limpieza y una sala de fisioterapia equipada con agua fría y ACS para la recuperación de los deportistas. Además, se mantendrá un vial perimetral con el ancho de seguridad necesario para el tránsito tanto de vehículos como de peatones, mejorando la accesibilidad general del recinto.

El diseño del módulo se basa en el uso de módulos prefabricados metálicos, lo que permite generar volúmenes estructurados con un alto nivel de modulación. La fachada principal incluirá un sistema de lamas horizontales que armonizará con el Polideportivo Larrabide, reforzando así la identidad del conjunto deportivo. En el interior, la arquitectura apuesta por espacios funcionales de bajo mantenimiento, con una estructura visible y un falso techo acústico que integrará líneas de iluminación para mejorar la acústica y el confort visual.

La obra avanza según el calendario previsto, cumpliendo los plazos establecidos en la planificación de construcción. Hasta la fecha, se ha completado la fase de demolición del graderío existente, realizado el replanteo y la preparación del terreno, y actualmente se encuentra en fase de cimentación.

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Desde el inicio de las obras, se ha diseñado un plan de uso deportivo que permite mantener operativa la instalación para entrenamientos y competiciones. Únicamente se cerró la pista de atletismo durante los días en que se llevó a cabo la demolición por motivos de seguridad. Además, se han reubicado temporalmente el espacio de jueces y juezas y la sala de foto-finish para garantizar el desarrollo de las competiciones sin interrupciones.

En la actualidad, los trabajos se centran en la fase de excavación y cimentación, incluyendo la instalación de una nueva red de saneamiento separativa. Esta mejora representa un avance significativo en términos medioambientales, ya que permitirá la separación de aguas pluviales y residuales, optimizando el sistema de drenaje del complejo deportivo.

Según el calendario previsto, la primera fase del proyecto concluirá el 9 de febrero de 2026.Esta actuación ha sido posible gracias a una subvención de 4 millones de euros concedida por el Consejo Superior de Deportes (CSD) en el marco de los Presupuestos Generales del Estado de 2023.