Se reanudan las conversaciones para aprobar el primer convenio navarro de residencias de mayores

La mesa negociadora para sacar adelante el primer convenio del sector de residencias de la tercera edad de Navarra ha celebrado este jueves su primera reunión desde junio de 2023. Un lapso de tiempo durante el que las conversaciones -iniciadas en mayo de 2021- han estado paradas, ha denunciado ELA, sindicato mayoritario en el sector. El responsable de servicios públicos de ELA, Izai Bujanda, ha detallado en la primera llamada del día que el compromiso adquirido por las partes "está por debajo de lo que nos hubiera gustado, como ha ocurrido desde 2021, pero sí es cierto que después de un año sin ninguna reunión, sí que por lo menos las patronales han asumido el compromiso de estudiar la propuesta que llevamos ayer". Las patronales se reunirán la semana que viene con el Gobierno foral y está previsto que traigan su propio texto a la próxima mesa de negociación convocada para el 7 de junio. ELA ha exigido al Ejecutivo una mayor implicación para conseguir un convenio que mejore las condiciones laborales en las residencias. Consideran que la responsabilidad del gobierno es "directa" porque el sector de las residencias se sustenta "con dinero público y es dependiente de la Administración".

Según han informado desde ELA en una nota de prensa, la situación de los trabajadores de las residencias de Navarra "es muy precaria: un convenio estatal con una jornada de 1.792 horas anuales, salarios que apenas llegan a 1.000 euros, bajas que no se complementan y trabajando la mayoría de los fines de semana y festivos". Por eso, en su propuesta de acuerdo llevan una reducción de la jornada anual y un aumento salarial acorde con el IPC: "Está en la senda de lo que hemos hecho hasta ahora. Esto es, 1.500 euros de salario para las gerocultoras, una reducción anual de jornada hasta las 1.592 horas, que las bajas por IP estén complementadas y una cláusula de descuelgue que blinde los derechos de las trabajadoras". Además, "en aras de desatascar la situación, de que esto avance, hablamos de ampliar la vigencia del convenio hasta finales de 2025 porque hasta ahora había sido hasta 2023 o 2024".

En un comunicado, ELA ha marcado como línea roja que el convenio respete "las condiciones actuales de las personas trabajadoras del sector con convenios de empresa propios, de modo que mantengan sus condiciones laborales y salariales superiores y más beneficiosas". También defienden que la plantilla vea revalorizados sus salarios durante la vigencia del convenio con subidas vinculadas al IPC para que el convenio sectorial no suponga una merma en sus condiciones laborales y salariales.