María Sonia Cristoff: "No somos libres, la libertad es una utopía en este sistema"
La escritora argentina nos presenta 'Derroche', una novela contra el trabajo, tal y como está entendido en el sistema capitalista. Desde el anarquismo y el feminismo, Cristoff defiende que el tiempo es una cuestión política y denuncia la esclavitud a la que nos somete el trabajo y nosotros mismos
María Sonia Cristoff: "No somos libres, la libertad es una utopía en este sistema"
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Vivir para trabajar o trabajar para vivir, dos formas de vida que se desarrollan cada día en muchos de los individuos que conforman la sociedad contemporánea y actual. María Sonia Cristoff (Argentina, 58 años), apuesta por una vía más utópica, por una rutina alejada de la asfixia, las presiones y los dramas laborales. 'Derroche', en Random House, es una novela que nos invita a reflexionar sobre los dilemas que plantea el trabajo. Una carta de renuncia al trabajo, una novela irónica y corrosiva que incita a la rebelión contra el dominio del éxito y el mandato productivo.
El tema de la crítica laboral late en todos sus trabajos, pero en 'Derroche' es la columna vertebral. Después de danzar del pluriempleo por necesidad, aboga en estas páginas que la vida es política. Una carta sorprende a Lucrecia. Entre frases iracundas contra el trabajo y el mito del progreso, Vita, su tía recién fallecida, encriptó el mapa de un tesoro enterrado en medio de La Pampa. Del mail a la autobiografía, de la crónica de viajes al retrato y el telegrama, del teatro al cancionero anarquista, la novela se va armando en una superposición de personajes, formatos y géneros.
Portada de 'Derroche', de María Sonia Cristoff / Random House
Desde este lugar crítico con lo establecido, Cristoff escribe en tono polémico y crea tres personajes que están sometidas a cumplir unos niveles de productividad constantes desde una falsa calma social. Derroche es una vía de escape para aceptar que somos esclavos de nosotros mismos y del sistema que nos recorre tanto en el espacio público como en lo más íntimo. Cristoff escribe desde un estilo muy singular, desde formatos no ficcionales, como correspondencias, retratos o crónicas de viaje para atacar los estándares que conforman la novela clásica. Una escritura fronteriza entre la ficción y la no ficción que da como resultado un collage de citas y géneros literarios que ilustran el discurso de la escritora para inducir al lector a la reflexión y no a la resolución.
Con miedo de proponer en sus páginas algo con lo que ni siquiera ella estuviera de acuerdo, encontró en el movimiento anarquista una línea de pensamiento con la que comulga y defiende en 'Derroche'. La novela defiende la voluntad del cambio y la aceptación objetiva de la realidad laboral y política en la que estamos inmersos, siempre desde el saber situado de cada uno de los individuos.
Pintada anarquista contra el capitalismo en Madrid / Daniel de la Fuente
Además, el feminismo recorre toda la historia. Reflexiona trayendo a colación mujeres como Silvia Federici sobre el trabajo doméstico y la confabulación de convertir vidas en trabajos a tiempo completo desde un sesgo de género. Cosificación, banalización y ausencia de referentes son algunas nociones que apelan directamente a las protagonistas de 'Derroche'. María Sonia Cristoff sigue creyendo en destellos posibles y utopías realizables en torno a un cambio político y laboral del sistema capitalista.
