El PP lleva a la Justicia al borde del precipicio

Carlos Lesmes cumple su amenaza y dimite. El presidente del Consejo General del Poder Judicial anunció ayer, un domingo por la noche, su dimisión, tras cuatro años con el mandato caducado. La dimisión de Lesmes ha sido algo así como una dimisión en diferido. La anunció el día de la apertura del año judicial, en caso de que los dos principales partidos, PSOE y PP, no tuvieran voluntad recíproca de llegar a un acuerdo. Luego parecía que la fecha no iba a ser antes de que el Poder Judicial eligiera a los dos miembros del Constitucional, pendientes de designar desde el 13 de septiembre. Y, de golpe ayer, en plena jornada dominical, anuncia su marcha.

Tras más de 1.400 días con el mandato caducado, la dimisión de Lesmes abre ahora una crisis institucional sin precedentes en la Justicia, no solo por su recambio, por los recambios pendientes en el Constitucional, por el colapso en varias salas del Tribunal Supremo en las que hay vacantes por cubrir... Son las dramáticas consecuencias de cuatro años de bloqueo del Partido Popular, fuera quien fuera, fuera quien estuviera en su dirección, para la renovación del principal órgano de los jueces.

Es el PP el que ha llevado a la Justicia de este país en el punto en el que se encuentra hoy, al borde del precipicio, más allá de que Lesmes toma ahora una decisión que hace mucho tiempo que debería haber tomado. Cuatro años diciendo que la dimisión no era la solución para acabar dimitiendo después de que la erosión en la Justicia parece ya insalvable y dejando en Europa una pésima imagen de esa justicia.

Ayer, Lesmes, en su intervención, por sorpresa, parece eludir toda responsabilidad en una situación de la que él también es responsable, también tiene algo que ver en el incumplimiento constitucional permanente para la renovación del Poder Judicial. Lo que hace ahora lo podría haber hecho al día siguiente de que caducara su mandato. Dice ahora que no quiere convertirse en cómplice de una situación que aborrece y que es inaceptable. ¿Desde cuándo la situación le aborrece? ¿Desde cuándo cree que es inaceptable?

Porque inaceptable es desde el momento en el que el PP decidió no cumplir con el mandato Constitucional, desde el primer día que buscó una excusa para no hacerlo. Hoy Alberto Núñez Feijóo se va a reunir con el presidente del Gobierno, que le llamó inmediatamente tras la dimisión. ¿Qué va a hacer ahora el líder del Partido Popular?