Los bomberos "entierran" el consorcio provincial para reclamar mejoras laborales

Lugo

Los bomberos de los parques comarcales de Galicia llevan en huelga indefinida desde junio, en Lugo desde el día 9 de ese mes. Los integrantes de los seis parques comarcales de al provincia, y otros llegados del resto de Galicia, se han manifestado en la capital lucense portando un ataúd.

Pretenden simbolizar el "fallecimiento" de los consorcios provinciales. El féretro, cargado por cuatro bomberos y acompañado de otro manifestante vestido de párrocos, iba rodeado de coronas de flores con cintas en las que se podían leer, por ejemplo, "recuerdo del presidente Alfonso Rueda".

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Para completar la escenificación, los manifestantes reparten esquelas en las que puede leer que los consorcios de bomberos finaron "en octubre del 2023 después de no recibir los auxilios políticos".

Aparecen además referidos como "sus desconsolados padres" Alfonso Rueda, presidente de la Xunta, y Santiago Villanuea, Director Xeral de Emerxencias de Galicia. En la siguiente línea se pueden leer los nombres de "sus hermanos políticos", los cuatro presidentes de las diputaciónes gallegas. Entre ellos también el de José Tomé, presidente de la institución provincial de Lugo.

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Reivindicaciones

Los bomberos aseguran estar muy indignados a estas alturas, y piden que se reactive la mesa de negociación de un convenio colectivo unificado para las cuatro pronvicias.

Entre las demandas se incluyen la conversión a personal fijo, mayor dotación de medios técnicos, de recursos humanos y un aumento salarial.

A este respecto, su petición pasa por que se les pague "lo que está estipulado en el resto del país", en palabras de José Luís Pareja, miembro del comité de huelga. Supone un aumento del 50% sobre su sueldo actual.

Reconocen que es una subida significativa, pero esto responde a que hasta ahora se ha "rebajado injustificadamente" su retribución, y no se estaban pagando cuestiones como los pluses de peligrosidad.

Afean además que los servicios mínimos de la huelga sean equivalentes al servicio ordinario. Para el comité de huelga esto demuestra que llevan varias décadas desempeñando su trabajo con personal insuficiente.

Por eso reivindican también la necesidad de que los aprques comarcales cuenten con una dotación mínima de cinco efectivos, en lugar de tres como hasta ahora. Sin este incremento consideran inviable cumplir los protocolos de actuación en accidentes de trafico o incendios, mucho menos en fuegos industriales.