Desmantelan una plantación de marihuana y un laboratorio para fabricar resina de hachis en un caserío de Ayala

Vitoria

Un hombre de 66 años ha sido detenido y otro de 37 figura como investigado al hallar en una vivienda unifamiliar del valle alavés de Ayala una plantación de marihuana y un laboratorio para fabricar resina de hachís de alta concentración.

Según ha informado este martes el departamento vasco de Seguridad, en esta operación han sido decomisados algo más de 4 kilos de cogollos de marihuana y unas 250 plantas, junto con otras cantidades de la citada resina.

La intervención tuvo lugar el pasado sábado por la tarde después de que agentes de la Etzaintza de la comisaría de Llodio detectaran un fuerte olor a marihuana procedente del interior de un caserío.

En el lugar se encontraba el propietario, que fue identificado, y seguidamente los agentes hallaron numerosas plantas de marihuana en diversas fases de crecimiento, semilleros, ramas en un secadero, recipientes con cogollos, varios armarios provistos con elementos de iluminación y ventilación, así como productos para el cultivo, por lo que el dueño fue arrestado acusado de un delito contra la salud pública.

Posteriormente, en una inspección más exhaustiva del inmueble, los ertzainas descubrieron en una habitación de la casa un armario con unas 50 plantas de marihuana, en otra dependencia otros dos armarios con cerca de 80 plantas, un tercero con un semillero de más de 70 plantas y en la planta superior un secadero con unas 85 ramas colgadas. En otra estancia localizaron una treintena de botes de cristal con cogollos y botes con la citada resina de hachís y con semillas.

Además, en un pabellón adyacente, fue hallado el laboratorio para fabricar esa resina de alta concentración, que tiene más de un 60 % de THC y es conocida como Rosin. Tiene un alto valor en el mercado, superior a los 100 euros el gramo, y la Ertzaintza alerta de la peligrosidad de su consumo.

En la operación se incautaron tres máquinas centrifugadoras para transformar las flores en resina, moldes metálicos para elaborar las placas de hachís y cerca de una treintena de bolsas con cogollos de marihuana frescos. En otro pabellón había una huerta con una veintena de plantas y en una zona ajardinada más espacios dedicados a la siembra y un invernadero con más cultivos de marihuana.

Además, se constató la existencia de un enganche ilegal al sistema eléctrico que abastecía la plantación por lo que al detenido se le acusa también de un delito de defraudación del fluido eléctrico.

Otro hombre también está acusado de estar implicado en este entramado y se han abierto diligencias contra él como investigado.

En su vivienda de LLodio fueron aprehendidos más de 400 gramos entre marihuana y hachís, decenas de botes de cristal que contenían dicha resina, tres balanzas de precisión y herramientas necesarias para la elaboración de Rosin, entre otros enseres.

El dueño del caserío fue puesto a disposición del Juzgado de Amurrio, que decretó su libertad con la condición de presentarse en las dependencias judiciales los días 1 y 15 de cada mes, mientras que el investigado también fue citado para su comparecencia en sede judicial.