El padre de uno de los menores agresores se venga por la denuncia
Ha ocurrido en un caso de tocamientos en un colegio de Soto del Real. El padre de uno de los agresores se venga de la madre de la víctima usurpando su identidad en una página de contactos sexuales
Padres acompañando a sus hijos al colegio (Archivo) / SER Madrid Norte
Soto del Real
El pasado mes de marzo se producía una denuncia por tocamientos de un grupo de alumnos a una alumna en un centro educativo de Soto del Real. Una compañera del centro tras presenciar los hechos los puso en conocimiento de su madre quién habló con la madre de la agredida y presentó denuncia.
Desde la Guardia Civil recuerdan que los menores son inimputables y estos alumnos tienen menos de 14 años. Por tanto solo puede activarse el oportuno protocolo de acoso escolar en el centro educativo.
Mercedes Martín, portavoz Guardia Civil explica que los menores no son imputables y se activa el protocolo contra acoso del centro
00:21
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1475240956_908911/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Lo llamativo del caso es que el padre de uno de los agresores en vez de intentar enmendar la actitud de su hijo usurpó la identidad de la madre para vengarse por la denuncia interpuesta suscribiéndola en una página de contactos sexuales. La madre de la víctima empezó a recibir correos de contenido sexual tanto de España como del Extranjero. Interpuso denuncia, el hombre fue identificado y ahora se enfrenta a un delito de usurpación de identidad y otro contra la intimidad.
Mercedes Martín, portavoz Guardia Civil explica que el padre del agresor se vengó de la madre de la víctima
00:33
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1475241068_700297/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Según la Consejería de Educación, la dirección del centro aplicó su reglamento de régimen interno para imponer una sanción disciplinaria a 3 alumnos por falta muy grave que supuso su expulsión de determinadas clases durante seis días.
La inspección educativa actúo inmediatamente y determinó en su informe que no se produjo un caso de acoso escolar sino de tocamientos en una situación concreta en el patio del colegio. Además se hizo seguimiento del caso hasta el final del curso escolar.
