"Me despedí del trabajo"
Con más de 160.000 vascos desempleados en Euskadi, jóvenes como Saioa, Nere, Iñigo o Leire optan por dejar el trabajo y apostar por su proyecto profesional
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Bilbao
Cuando en Euskadi más de 160.000 vascos engrosan las listas de Lanbide en busca de una oportunidad laboral, otros, cansados de la rutina o de la falta de promoción en su empresa, deciden abandonar la estabilidad y optan por dejar su trabajo. En A vivir que son dos días Euskadi, escuchamos historias como la de Saioa Aguirre. Llevaba diez años dedicándose a labores de auditoría. Hace poco más de un mes, decidió dejar un sueldo, dijo adiós a su independencia y regresó a casa de sus padres a Bilbao con una idea en su cabeza: poner en marcha su proyecto de moda thehighville
Algo parecido le ocurrió a Leire Urzaiz. Ingeniera especializada en organización de empresas en Deusto, tras ocho años trabajando en empresas de moda, decidió cortar con todo y poner en marcha su sueño: diseño de collares. Desde hace dos años tiene su propia empresa: Papiroga
Han cumplido su sueño profesional.
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La historia de Nere Ariztoy, de Hondarribia, es la de una aventurera. Trabajaba en un periódico como ejecutiva de cuentas. Su sueño era dedicarse al sector del turismo. Surgió una iniciativa del Gobierno de la Rioja y no lo dudó. Sus hazañas se pueden seguir en yanohayvueltaatrás.
El donostiarra Iñigo Domínguez, ingeniero, tenía 25 años cuando optó por dejar su trabajo y crear su propia empresa. "No tenía nada que perder más que un trabajo estable", dice. Ahora es el responsable de Omega Composites, empres que da servicios materiales compuestos.
Para Javier Garcinuño, de Hasten Ventures, "es importante buscar sinergias con otras empresas a la hora de emprender".