El Benítez podrá tener un restaurante o un museo
El Ayuntamiento, finalmente, podrá saltarse la 'tutela' del Gobierno e instalar una concesión privada en el Campamento Benítez, concretamente en la parte del antiguo acuartelamiento que pertenece a particulares y no fue cedida por el Ejecutivo
El consistorio conseguirá mediante permuta 30.000 metros cuadrados de privados dentro del ámbito del antiguo acuartelamiento militar que podrá destinar a usos como un restaurante, un museo o un centro de actividades relacionadas con la naturaleza, una operación urbanística que ya estaba prevista. Eso sí, el ayuntamiento tendrá que compensar con terrenos en otro sitio a los propietarios de esa parcela.
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El equipo de gobierno del PP en el ayuntamiento de Málaga cuenta finalmente con un mecanismo para poder evitar los condicionantes que impuso el Gobierno en su 'cesión tutelada' del Campamento Benítez a la ciudad. El ministerio de Fomento exigía al consistorio que los terrenos del antiguo acuartelamiento militar fuesen destinados a un parque, lo que ponía dificultades a la intención del gobierno de Francisco de la Torre de instalar una concesión privada en la parcela, como por ejemplo, un kiosko para ofrecer comidas o bebidas.
Pero existía una alternativa: ubicar ese equipamiento o concesión sobre los 30.000 metros cuadrados que desde el ayuntamiento estaba previsto adquirir desde el principio dentro del ámbito del Campamento Benítez perteneciente a propietarios privados, un suelo calificado como Sistema General en el Plan de Ordenación Urbanística (PGOU), por lo que la cesión de esos suelos al consistorio es obligatoria. El ayuntamiento conseguirá esa parcela compensando con otros terrenos a los propietarios y, una vez obtenidos, no estará condicionados por las limitaciones del Gobierno; así las cosas, el equipo de gobierno prevé instalar en ellos un gran equipamiento cuyo uso no está definido y que saldrá a concurso público. El concejal de Urbanismo, Francisco Pomares, dice que ese uso está completamente abierto y puede ir desde un restaurante, un albergue o un centro de actividades relacionado con la naturaleza para organizar rutas senderistas o juegos de escalada o incluso un museo: "Depende de lo que nos aconsejen los profesionales", señalaba el edil, que no ponía fecha para llevar a cabo ese concurso.
El equipo de gobierno explica que el uso el Benítez, con 290.000 metros cuadrados en total, "va a ser mayoritariamente el de Parque Metropolitano del Mediterráneo, al que obliga la cesión de los terrenos y que es coherente con su estado actual compuesto mayoritariamente por masas arbóreas de pinares que deben ser conservadas...".
El Benítez contará además con cerca de 450 aparcamientos para coches, pero también para motos, bicis y autocares. Además de los dos accesos para vehículos, el consistorio prevé otros tres peatonales o en bicicleta para acceder al recinto desde la parada del tren del centro comercial Plaza Mayor, por la antigua carretera del Parador del Golf o desde el antiguo apeadero del Benítez; este último crearía una conexión que permitiría el acceso a la playa.
Este antiguo acuartelamiento también recogerá una zona deportiva con dos recorrido de cross, que se recogen el Plan Especial que el ayuntamiento acaba de empezar a tramitar.
APROBACIÓN DEL PLAN ESPECIAL
El consistorio ha aprobado ahora iniciar la aprobación de ese Plan Especial del Campamento Benítez, a pesar de que ya se han ejecutado las obras de la primera fase (un millón de euros destinado a la creación de una laguna, así como la red de abastecimiento, electricidad y riego), un procedimiento anómalo para la oposición, que había criticado en reiteradas ocasiones que las prisas electorales de De la Torre por acabar el parque antes de la cita con las urnas le había llevado a actuar sin acometer los pasos urbanísticos necesarios. El concejal Pomares rechaza la mayor e insiste en que se ha actuado correctamente.
El caso es que ahora el proyecto saldrá e exposición pública, cuando ya se ha ejecutado parte de la actuación prevista.
El equipo de gobierno también ha recibido numerosas críticas por haber dividido en cuatro partes el presupuesto inicial de un millón de euros ya ejecutados en los terrenos para evitar sacar los trabajos a concurso público.
Para este ejercicio hay previstos otros dos millones de euros más.