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El fiscal acusa de homicidio a los mossos imputados por el 'caso Raval'

La acusación particular ha acusado a los mossos de homicidio doloso y las defensas han reclamado el sobreseimiento

Un fotograma del vídeo publicado por el diario EL PAÍS que muestra la actuación de los mossos en el Raval el 5 de octubre(El País)

Un fotograma del vídeo publicado por el diario EL PAÍS que muestra la actuación de los mossos en el Raval el 5 de octubre

La fiscalía ha acusado de homicidio aocho de los diez mossos de escuadra imputados por la muerte de un empresario en el barrio de El Raval de Barcelona tras su detención el pasado 5 de octubre. En su escrito, al que ha tenido acceso la SER, la fiscal dice que los agentes eran conscientes de que la fuerza que estaban empleando podía matar al detenido.

El fiscal ha atribuido este viernes un delito de homicidio doloso a ocho de los mossos imputados por la muerte del empresario Juan Andrés Benítez al ser detenido, aunque ha dejado la puerta abierta para poder acabar calificando los hechos desde homicidio imprudente hasta asesinato, han informado fuentes judiciales.

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En una comparecencia convocada por la juez que investiga el caso para que las partes concretaran la actuación de cada uno de los diez agentes, el fiscal ha atribuido a ocho agentes un delito de homicidio doloso, mientras que la acusación particular ha acusado a nueve mossos de homicidio doloso/asesinato y las defensas han reclamado el sobreseimiento.

En el escrito presentado este viernes, la fiscal ha considerado que podría tratarse de un delito contra la vida "cuya determinación dolosa o imprudente, dependerá del resultado de las diligencias". Ve indicios de que los mossos aún sin tener intención directa de causar la muerte de Benítez, "puestos de común acuerdo y con unidad de propósito delictivo colocaron a la víctima en una clara situación de riesgo y peligro que podría desembocar en su fallecimiento" sin que pudiera escaparse.

La otra opción que baraja el Ministerio Público es la de que, también puestos de común acuerdo, "su pretensión era únicamente la de lesionarse contraviniendo, al hacerlo, tanto las normas y reglas mínimas de cuidado que se asumirían por un ciudadano medio, cono sus deberes profesionales".

La fiscal ve desproporcionado el número de agentes empleados en la noche del 5 de octubre para reducir a Benítez, la cantidad de golpes que le profirieron porque se los dieron cuando ya estaba tumbado en el suelo, y también "a todas luces excesiva" la duración de la contención.

También apunta a que, pese a que una ambulancia estaba presente en la calle Aurora desde el momento que en que llegaron los mossos, los agentes no requirieron su intervención hasta que Benítez quedó inconsciente. En todo caso, la fiscal ha añadido que los ochos agentes en su actuación menoscabaron "la dignidad que como persona tenía el señor Juan Andrés Benítez".

 
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