El Prado saca de sus catacumbas pinturas religiosas del siglo XIX

Son cinco cuadros, algunos de gran formato, firmados por Eduardo Rosales, Luis de Madrazo, Domingo Valdivieso y Alejo Vera. Cuatro de ellos han sido restaurados para la ocasión y no se exhiben habitualmente al público por razones de espacio

A mediados del siglo XIX el descubrimiento de los enterramientos en las catacumbas de Roma de los primeros mártires cristianos supuso un revulsivo para el género de la pintura religiosa. Los pintores españoles que fueron a la capital italiana para completar su formación académica también se vieron influenciados por esa corriente. Viajaban a Roma disfrutando de una pensión oficial estaban obligados a realizar una gran pintura de composición que justificara sus estudios. El Prado ha elegido cinco ejemplos significativos.

Por fecha de realización, el primero de ellos es 'Entierro de santa Cecilia en las catacumbas de Roma` pintado por Luis de Madrazo en 1852. En esta obra ya se apuntan las características renovadas del género con un dominio de la luz que confiere a las escenas un ambiente más espiritual. Un nuevo uso de la luz que se plasma también en el cuadro de Alejo Vera 'Entierro de san Lorenzo en las catacumbas de Roma` (1862) en el que muestra también un delicado tratamiento del paño que cubre al santo.

Dos años más tarde el pintor murciano Domingo Valdivieso terminó 'El Descendimiento`. Para realizarlo usó como modelo para la figura de Cristo a su compañero de academia Eduardo Rosales. De este pintor madrileño se exhiben dos cuadros como final de la muestra: 'Tobías y el ángel` y 'Estigmatización de Santa Catalina de Siena` con los que empezó a romper la pintura purista y comenzó su incursión en un realismo de raíz velazqueña.

Los cinco cuadros pueden contemplarse en la sala 60 del Museo del Prado junto a las grandes obras de pinturas española de historia del siglo XIX. Se exhibirán al público durante algo más de un año.

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