Más inspectores para luchar contra los defraudadores

El diputado Jose María Iruarrizaga ha presentado el Plan Estratégico de la presente legislatura que estará marcada por un contexto económico difícil en el que se "camina por el fondo" y no se vislumbra una recuperación cercana, por lo que deberán primar los criterios de "equidad, eficiencia y suficiencia recaudatoria"

Pese a que la premisa fundamental es la de ajustar el Presupuesto, la Diputación es consciente que seguir descubriendo la bolsa de fraude es un buen lugar desde el que obtener recursos económicos. Por ello, se ha reservado una partida para lanzar una OPE de ocho inspectores de finanzas, todavía sin fecha determinada. Más plantilla y más medios informáticos. El ejecutivo foral pondrá en marcha un sistema puntero, ya probado en otros países europeos, que permitirá "la identificación, detección de interrelaciones de los contribuyentes y ayudará en la fijación de los niveles de riesgo para detectar las situaciones de fraude" porque ha explicado Iruarrizaga, una de las claves es "la buena y abundante información de las bases de datos". Por ello también se continuará con la coordinación entre las administraciones.

Los próximos cuatro años se reestructura el organigrama del departamento. En vez de cuatro, habrá tres grandes Direcciones Generales. Una de ellas bajo el nombre Catastro y Servicios tendrá como objetivo implantar el nuevo modelo de catastro. Se unificará la valoración fiscal de los inmuebles en 112 municipios bizkainos, excepto Bilbao y Basauri que tienen el suyo propio, algo que requerirá y así lo ha pedido el diputado de la "colaboración" de todos y la aprobación de un nuevo marco jurídico.

En materia tributaria hay dos retos fundamentales que pasan por la reforma del IRPF "con un control adecuado" y del Impuesto de Sociedades convirtiéndolo en un "instrumento eficaz" que prestará especial atención a los emprendedores.