El Ayuntamiento de València propone trasladar y fragmentar la edificabilidad para impedir el macrohotel de Zaidía

València

El traslado y la fragmentación de la edificabilidad en cuatro parcelas independientes y meramente residenciales. Esa es la propuesta que el Ayuntamiento de València ha presentado este viernes a la Asociación de Vecinos del barrio San Antonio-Zaidia para evitar la construcción de un macrohotel con más de 500 habitaciones que una empresa privada quiere realizar en el patio interior de una manzana de casas de la calle Guatla y que cuenta con el rechazo vecinal.

El alcalde de la ciudad, Joan Ribó, asegura que "la contrapropuesta plantea dos grandes elementos que habían sido una gran reivindicación vecinal: trasladar y fragmentar esta macrorresidencia mediante una modificación urbanística" y la creación de nuevas zonas verdes y nuevas áreas "para servicios que, en el futuro, puedan ser dotaciones para un barrio que tiene una baja dotación".

Por su parte, la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, celebra que la propuesta municipal "impide que un proyecto como un macrohotel se instale en una zona que no deja de parecerse a un patio interior de manzana de casas, con los conflictos y los ruidos que podría ocasionar y, por lo tanto, con la perturbación de la convivencia".

Además, la edil señala que se trata de una solución que no genera un "grave desequilibrio económico al consistorio", ya que se mantienen los derechos de edificabilidad de la empresa. "Y, sinceramente, creo que es la mejor solución al problema que arrastramos desde hace tiempo", termina.

Las naves se derribarán "parcialmente"

A pesar de la solicitud vecinal de proteger las naves industriales de la antigua fábrica de hilados, trenzados y tejidos de yute de Pilar Casanova, la titular de Urbanismo explica que las naves del barrio de Zaidia deberán ser derribadas, al menos "parcialmente": "Con la solución que nosotros estamos planteando, se debe generar una nueva zona verde, por lo tanto, parcialmente seguro que sí que se derribarán las naves".

Sin embargo, Gómez afirma que se ha preferido dejar para un debate posterior la posibilidad de que la nave principal pueda pervivir o no, o pueda generar una nueva construcción que albergue un servicio público.