El invento llamado a revolucionar el mundo de la Agricultura: se patentó en Valdepeñas en 1947

Valdepeñas (Ciudad Real)

¿Sabías que la primera mula mecánica del mundo es española? Su Historia comienza en 1945, en los años sucesivos a la Guerra Civil Española, cuando dos habitantes de Valdepeñas (Ciudad Real), Manuel Villalba y Luis Sánchez, buscaron una alternativa a la escasez de animales para poder llevar a cabo las labores agrícolas. Una escasez de ejemplares motivada por la contienda civil, en donde murieron buena parte de ellos. Además, ante la hambruna creciente en el país, estos animales se destinaron al consumo humano.

Con todo ello, Manuel y Luis idearon una herramienta que sustituía a las mulas para poder realizar las labores de arado en el Campo. En este aspecto, el primer prototipo vio la luz en 1947, año en el que, también, decidieron patentar este nuevo invento. De hecho, ese mismo año, una empresa de Barcelona intentó plagiarlo, por lo que acabó siendo denunciada. Una herramienta de la que, tal y como relataba el actual portavoz de ambas familias, Eugenio Sánchez, tenía conocimiento el dictador, Francisco Franco. Además, el propio Franco hizo parada en Valdepeñas, en uno de sus viajes hacia la zona sur de España, para conocer las pruebas que se estaban realizando con esta nueva maquinaria.

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No obstante, su visita a la localidad vinatera fue meramente para hacerse la foto, puesto que estos dos valdepeñeros, posteriormente, intentaron que el Estado comprase su patente y comenzase a fabricar esta mula mecánica en seri. Un hecho que jamás fue factible y, precisamente, la falta de financiación hizo que desistieran, poco después, y dejasen de pagar la cuota por la patente. Una circunstancia que fue aprovechada por otros países del continente europeo para realizar instrumentos similares, que comenzaron a fabricar en serie.

También, esta mula mecánica fue bautizada con la marca de "Villsan" que se conformaba con las primeras letras del primer apellido de sendos inventores. Además, durante su restauración, se ha localizado una firma con el nombre de "Manuel V.", así como otras letras que no han sido posible descifrar su significado. Unos hallazgos que ha puesto en valor el director del Museo del Vino de Valdepeñas, Manuel López, durante la puesta de largo de este nuevo objeto en estas instalaciones. Una mula mecánica que ha sido cedida a este Museo y que posibilitará ver de cerca el invento que estaba llamado a revolucionar el mundo de la Agricultura, pero que se truncó por la falta de financiación.

El invento valdepeñero que hubiera revolucionado la Agricultura: abaratar los costes de 50.000 a 15.000 pesetas

Esta mula mecánica tradicional, según las crónicas de la época, tenía un coste de producción de unas 15.000 pesetas. Un coste que distaba, y mucho, de los 50.000-60.000 pesetas que podía costar llevar a cabo estas mismas labores con mulas, tal y como ha recordado el alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín. Un abaratamiento de costes que nunca pudo llegar a los miles de agricultores de aquella etapa de la Historia española.

En este aspecto, Martín ha detallado que "fijaros el desarrollo que hubiera tenido la Agricultura en Valdepeñas (...) si hubieran contado con este recurso que lo teníamos aquí". Además, lamentaba que no pudo llegar a esa fabricación en serie "por falta de sensibilidad o, quizás, por intereses ocultos". Una herramienta pensada para ser empleada en las pequeñas y medianas explotaciones agrícolas que, por ejemplo, en Valdepeñas representaban el 95% del total.

Emprender en tiempos de post-guerra

Una documentación histórica que ha sido recopilada por la Asociación Orisos de Valdepeñas, quiénes han puesto en valor el ADN emprendedor de estos dos valdepeñeros en unos momentos duros para la sociedad española, puesto que en 1939 había concluido una sangrienta Guerra Civil y el país había quedado dividido en dos bandos. De hecho, en aquellos años, además, los asesinatos se sucedían por diferentes puntos de la geografía española.

Con ello, una de las miembros de Orisos, Eva María Jesús Morales, detallaba que "ambos se convierten en baluarte del emprendimiento, del afán de superación en los difíciles años de postguerra (...) alentaron un espíritu creativo al servicio del pequeño agricultor". Además, ha relatado que a ambos les unía un interés común, como era la mecánica del automóvil y la afición por la radiodifusión y el Deporte.

Por último, esta primera mula mecánica tradicional se puede visitar ya en el patio del Museo del Vino, cuya entrada tiene un coste de 3 euros, aunque cuenta con una entrada reducida de 2 euros para jubilados, personas con discapacidad y jóvenes con carnet de estudiantes. También, los menores de 12 años no pagan entrada y los grupos de más de 11 personas se pueden acoger a una entrada reducida de 2 euros.