De Garitano a Cervera: 4 entrenadores en 365 días de inestabilidad en el CD Tenerife

Santa Cruz de Tenerife

El baile de entrenadores en el CD Tenerife ha quedado reflejado en el cierre de este 2024 con la llegada del cuarto técnico al banquillo blanquiazul en apenas 365 días, síntoma de la inestabilidad deportiva de un año en el que el cuadro tinerfeño ha ido empeorando registros y sensaciones mes a mes. Asier Garitano estaba al frente del equipo en el inicio de 2024, con el Tenerife en el puesto 12, con 31 puntos, a 4 del playoff y con 8 de renta sobre el descenso. Solo seis victorias más lograría aquel equipo antes de finalizar la temporada 12º con 56 puntos. El siguiente técnico elegido por José Miguel Garrido fue Óscar Cano, en una apuesta que desde el principio no pintaba bien. Únicamente cinco jornadas resistió como entrenador después de solo lograr tres puntos de quince disputados. Cano no aguantó el mal inicio, donde ya las sensaciones eran negativas, lo que llevó de nuevo al club a contratar otro estratega y llamó a Pepe Mel, que meses atrás estuvo a punto de venir a la isla cuando Garitano salvó su puesto con un triunfo ante el Eldense que evitó su cese y que Mel viniera en febrero.

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Pero con el experimentado entrenador madrileño la situación no solo no mejoró sino que ha ido a peor. 10 puntos de 48, con dos victorias, cuatro empates y ocho derrotas liquidaron a Pepe Mel justo con el cambio de gobierno en el Consejo y Rayco García guillotinando al tercer entrenador del año en el banquillo del Heliodoro. Y es Álvaro Cervera el cuarto profesional que tiene al mando el Tenerife a lo largo del año que hoy se acaba, aunque su estreno, en una situación muy complicada, no se producirá hasta el próximo sábado 4 de enero, ya con 2025 dictando los pasos de un club que espera con Cervera recuperar la estabilidad en el cargo más inestable y arriesgado de la entidad.