El CD Tenerife visita a un rival mejorado en casa, pero siendo el segundo peor equipo de la Liga Hypermotion como local

Santa Cruz de Tenerife

No parece un rival de la liga del Tenerife, pero, dadas las circunstancias, la Agrupación Deportiva Alcorcón se presenta como un rival a tener en cuenta por parte del equipo de Asier Garitano, más desde la llegada de Medi Nafti al banquillo alfarero y la recuperación de los madrileños en los partidos en los que el preparador franco tunecino lleva al mando. Nafti debutó justamente ante el CD Tenerife en el encuentro de la primera vuelta disputado el 10 de diciembre en el Heliodoro Rodríguez López. Han sido desde aquel partido ocho más como míster del Alcorcón, con dos derrotas más, cuatro triunfos y dos empates. Donde se ha mostrado más sólido el club del sur de Madrid es en su estadio. En el Municipal de Santo Domingo ha disputado cuatro partidos, con dos victorias y dos empates y sin haber recibido ningún gol en esos cuatro partidos.

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Fuerte en Santo Domingo

Ante sus aficionados ha vencido 1-0 al Eibar y al Andorra, con empates sin goles frente a Mirandés y Real Zaragoza. Esa seguridad atrás solo la vio vulnerada la semana pasada en el duelo de cercanía ante el Leganés, que le endosó tres goles y rompió la buena línea atrás del cuadro de Nafti. Pese a todo, el próximo contrincante del CD Tenerife sigue en puestos de descenso, con 28 puntos y, aunque ha aliviado algo su posición en la tabla, no logra abandonar la zona roja, pero sí ha logrado acercarse a un punto al Huesca y a dos del Albacete, equipos fronterizos al límite de esos puestos de peligro. Sin embargo, esos datos no pueden llevar a engaño ya que la AD Alcorcón es el segundo peor equipo en casa en el cómputo global de la temporada, donde solo ha vencido en tres partidos, con cinco empates y cinco derrotas, siendo únicamente capaz de anotar cinco goles en su feudo. Unos guarismos que, en principio, deberían llevar al optimismo hacia lo que busca el CD Tenerife: volver a ganar lejos de la isla y de paso encadenar dos triunfos seguidos para ahuyentar fantasmas y apagar la crisis.