Cae la producción de uva balear debido a las altas temperaturas

Palma

Ya ha empezado la vendimia y este año viene definida por las altas temperaturas. Esto trae, en consecuencia, una bajada en la producción de uva en Mallorca y un adelanto en su cosecha. Los viticultores explican que esta subida tan anormal de las temperaturas ha afectado al periodo de maduración del fruto y ha adelantado la recogida, que normalmente comenzaría a finales de agosto.

Un arma de doble filo. Así ha definido José Luis Ferrer, presidente de Denominación de Origen Binissalem, la situación de olas de calor consecutivas que viven las Islas para el mercado de la uva. Por una parte, el calor reduce la humedad y ayuda a a erradicar hongos y enfermedades que pueden afectar negativamente en el desarrollo de las viñas. Pero, por otra parte, si las temperaturas son muy intensas, la planta deja de crecer y puede llegar a secarse.

Así, en los tres días que van de vendimia, Ferrer cuenta una poca producción de uvas pero de muy buena calidad gracias a los bajos niveles de humedad de estos meses. No obstante, si bien el calor ha propiciado un fruto bueno este año, podría repercutir de forma negativa en la cosecha de 2023.