Loyola Pérez: "En cada fotografía, he intentado captar lo que me decía la mirada de las personas que huyen de Ucrania"

Murcia

"Por favor, fotografíanos para que la gente sepa lo que nos están haciendo": ésa es la frase que una ciudadana ucraniana le dijo a Loyola Pérez de Villegas a un tren a punto de partir lleno de otros refugiados de este país. La fotoperiodista no supo más de esta mujer, ni del destino en el tren que partía destino a Bucarest desde la estación de Suceava, en Rumanía. Pero esa frase se le quedó grabada poco antes de captar una fotografía de ese momento.

Junto a otras catorce imágenes, podemos verla en la exposición 'Miradas de un éxodo', en la que Pérez de Villegas reúne parte del material y los retratos captados en la frontera entre Ucrania y Rumanía dos semanas después del inicio del conflicto. La muestra se expone en la Sala Pequeña del Museo de la Universidad de Murcia (UMU). Se inaugura este martes 3 de mayo a las 20 horas y estará abierta al público hasta el 20 de mayo de 11 a 14 y de 18 a 20.30 horas.

"No es lo mismo estar en la frontera que en el campo de batalla. Pero quería estar ahí para captar las consecuencia del conflicto tras la huida", ha señalado en la antena de 'Hoy por Hoy Murcia'. Centros de acogida, estaciones de tren, lugares de paso... son algunos de los escenarios de estas fotografías en las que todas tienen algo en común: el punto de atención está en sus miradas. Según Loyola Pérez, "en cada fotografía, he intentado captar lo que me decía la mirada de las personas que huyen de Ucrania".

Con ella también hemos hablado del papel de estos profesionales, "los ojos de la guerra", como muchas veces se les ha definido: "El trabajo de los fotoperiodistas es muy importante. Sin ellos, será muy difícil en un futuro juzgar lo que está pasando en Ucrania. Nunca se habría sabido lo que ha pasado en sitios como Bucha".

“Con quince fotografías parece difícil contar la historia de un éxodo. La de miles de personas que huyen cada día de una guerra que jamás hubieran imaginado y que parece no terminar nunca. Pero al mismo tiempo, estas quince fotografías; tan solo estas quince miradas aquí captadas, pueden ser el espejo de miles de historias”, explica la autora.