El presidente del TC está "convencido" de que se intentará acordar "pronto" la renovación del Poder Judicial
Pedro González Trevijano afirma en los Jueves de Actualidad del Instituto de Emprendimiento Avanzado que a las instituciones se las respeta "renovándolas en tiempo y forma"
Pedro González Trevijano, presidente del Tribunal Constitucional, que se ha mostrado positivo sobre la renovación del Poder Judicial. / Isabel Infantes/Europa Press (Getty Images)
Madrid
Pedro González Trevijano, presidente del Tribunal Constitucional, se ha pronunciado acerca de la renovación del Consejo General del Poder Judicial con una visión optimista. Ha hecho un llamamiento a que se llegue a un acuerdo desde el respeto entre las instituciones. Preguntado por la falta de acuerdo, González Trevijano ha reconocido que es una cuestión que le “ocupa”, pero que no le "quita el sueño" porque está "convencido de que las fuerzas políticas intentarán llegar pronto a un acuerdo para renovar el Consejo del Poder Judicial y en lo que pueda afectar a la inmediata renovación del Tribunal Constitucional".
Ha sido en los Jueves de Actualidad del Instituto de Emprendimiento Avanzado donde ha asegurado que las instituciones "se respetan y se respetan renovándolas en tiempo y forma". Pedro González Trevijano también ha salido al paso de las críticas hacia los retrasos en la resolución de los recursos. "El Tribunal Constitucional alberga distintas sensibilidades, tal y como quería el legislador al imponer su renovación por tercios cada tres años, pero, sin embargo, se le exige resolver pronto de forma unánime o mayoritaria asuntos complejos en los que hay distintas opiniones. No es justo", ha remarcado.
Cree que hay que alejar todo de la "refriega política" para poder ver el caso "con la perspectiva necesaria para resolverlo". El presidente del Tribunal Constitucional ha impartido en la sede del Instituto de Emprendimento Avanzado a impartir la conferencia "sentido y vigencia de la Constitución". González Trevijano ha evitado pronunciarse sobre el objeto del debate, pero sí que ha querido subrayar el contexto necesario para acometer una reforma que compete "exclusivamente a los operadores políticos".
Por último pide "consenso político en momento de distensión política y tener clara la respuesta a tres preguntas: qué se quiere reformar, para qué se quiere reformar y cómo se quiere reformar".
También "asentar en la sociedad española un sentimiento constitucional" como el que hay en Francia o en Estados Unidos o que la carta magna se estudie en los colegios. Recalca que la Constitución de 1978 es una constitución de consenso que copió lo mejor del constitucionalismo de nuestro entorno y que hizo que España entrara en la modernidad constitucional por la puerta grande creando un "régimen constitucional de verdad", garantizando derechos y libertades y consagrando el principio de separación de poderes.
