Cine y TV | Ocio y cultura
Festival de Eurovisión

La película sobre Eurovisión de Netflix: del error que involucra a España a los excesos más imprescindibles

El filme está protagonizado por Will Ferrell y Rachel McAdams

Póster oficial de 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' / Netflix

Madrid

Atención, este artículo contiene spoilers de Eurovisión: La historia de Fire Saga

Casi parece que Netflix sabía que el Festival de Eurovisión iba a cancelar su edición de 2020 por la crisis del coronavirus. El gigante del streaming ha estrenado este fin de semana 'Eurovisión: La historia de Fire Saga', una película que aborda la historia de dos músicos islandeses (encarnados por unos estupendos Will Ferrell y Rachel McAdams) un tanto extravagantes que después de años intentándolo reciben la oportunidad de representar a su país en el certamen de música más importante. Curiosamente, el largometraje, de dos horas de duración, recrea un hipotético Eurovisión 2020 en el que se recurre a partes fundamentales de este concurso, como son los excesos, el fanatismo y la música.

Amantes y detractores de Eurovisión

Una parte del fandom piensa que esta película no tiene nada que ver con Eurovisión, que no representa los valores que enmarca el certamen y que es una parodia que intenta reirse del festival. Sin embargo, 'Eurovisión: la historia de Fire Saga', sin ser una película del otro mundo, es bastante entretenida y ahonda en algunos aspectos que forman parte del ADN del concurso.

Básicamente, estamos ante una comedia romántica. Comedia, porque aborda los conflictos de los personajes y del festival en sí con mucha guasa y cierto sarcasmo; y romántica, porque además de esa relación sentimental que hay entre los dos protagonistas, se ve en muchas escenas ese "romanticismo" que siempre ha habido en torno a Eurovisión.

Will Ferrell y Rachel McAdams en 'Eurovisión: la historia de Fire Saga'

Will Ferrell y Rachel McAdams en 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' / Netflix

Desde el principio, además, se vislumbra que hay un debate: los que son fieles a Eurovisión y tienen un sentimiento de pasión absoluta hacía él y esa otra parte que menosprecia al concurso, pero cuando llega el día siempre se sienta en familia para verlo. Esa división existe en la realidad y es en esa meta-ficción con la que, si no eres uno de esos que se ofende por todo, disfrutarás de la película.

La preselección

El tono y la intención de la película se ve claramente en la preselección del Festival de la Canción. No hay Eurovisión sin una preselección y en 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' también lo hay. De hecho, es ahí donde se ponen todas las cartas sobre la mesa. Vemos la ilusión de un grupo que a priori no tiene ninguna posibilidad, escuchamos canciones que suenan al Eurovisión más petardo, y somos testigos del funcionamiento (en este caso regulero y corruptible) de las televisiones públicas, encargadas de gestionar y organizar la candidatura del país.

El concurso: aciertos, errores e invenciones

En la película de Netflix se ve cómo se hace Eurovisión detrás y delante de cámaras. Vemos los excesos, algunos bien representados y otros inventados para darle más humor a ciertas partes de la película. Sin embargo, vemos lo básico: un gran escenario, un público multitudinario, escenografías espectaculares, las icónicas puntuaciones y artistas para todos los gustos.

También hay errores garrafales, por muy intencionados que sean. La dinámica del Festival de la Canción es muy conocida y en algunos momentos se la inventan sin razón. Llama especialmente la atención el fallo que involucra a España, que participa en la semifinal del concurso cuando en realidad nuestro país siempre pasa directamente a la final por pertenecer al Big Five, el grupo de países que aportan más económicamente al festival.

En Eurovisión hay 'eurodramas' y en la película también

Los tópicos forman parte de la historia de Eurovisión y en la película de Netflix juegan con ellos a su antojo y, en muchas ocasiones, con bastante tino. El elitismo y la competencia que hay entre algunas delegaciones, sin ir más lejos, se refleja desde que Lars (Ferrell) y Sigrit (McAdams) llegan a Edimburgo (la ciudad anfitriona) para preparar toda su candidatura.

Dan Stevens interpreta al representante ruso de 'Eurovisión: la historia de Fire Saga'

Dan Stevens interpreta al representante ruso de 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' / Netflix

También se recurre a la polémica, como los problemas que todos los años hay con Rusia por ser un país que vulnera abiertamente los derechos de homosexuales. Aquí la película, a través del personaje de Dan Stevens ('Downton Abbey'), el representante ruso del festival, le da una vuelta de tuerca y parodia este conflicto.

Lo que no hay en 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' son menciones a ese favoritismo entre países del que siempre se habla en el festival. Esos intereses políticos que siempre han estado a la sombra no forman parte de la historia y tampoco se hace humor con ello.

Los cameos, una seña de identidad

No podía faltar en la película la intervención de algunas de las figuras más reconocibles del festival. En cada edición del concurso se recurre a los cantantes con mayor popularidad entre los seguidores de Eurovisión. Para esta historia, los responsables del filme han hecho lo mismo y han fichado a campeones de la talla de Alexander Rybak (Eurovisión 2009), Loreen (Eurovisión 2012), Conchita Wurst (Eurovisión 2014), Jamala (Eurovisión 2016), Salvador Sobral (Eurovisión 2017) y Netta (Eurovisión 2018).

Netta en la película 'Eurovisión: la historia de Fire Saga'

Netta en la película 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' / Netflix

La música

La música, evidentemente, tiene un papel clave en la película y consigue lo que Eurovisión consigue cada año: crear una banda sonora. Hay canciones para todos los gustos, algunas más eurovisivas que otras, pero hay ciertos temas que destacar, como 'Volcano Man', que presenta la película, 'Double Trouble' (muy Eurovisión de los 2000), 'In the Mirror' (el cameo estelar de Demi Lovato) y 'Husavik', una poderosa balada que tiene el efecto climax que casi siempre se da en Eurovisión.

En definitiva, 'Eurovisión: la historia de Fire Saga' sí es una película sobre Eurovisión, aunque solo se centre en ciertos aspectos del festival. En ningún caso ridiculiza o deja en mal lugar al certamen por mucha comedia que sea de Will Ferrell. No hay que tomársela muy en serio, pero sí atender a todos esos guiños que cualquier seguidores reconocerá y disfrutará en esta nueva producción original de Netflix.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00