Donald Trump pide también información al primer ministro de Australia para perjudicar a los demócratas
El fiscal general, William Barr, se reúne con oficiales británicos e italianos para recabar información con el objetivo de denigrar el Informe Mueller
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca / Contacto (Europa Press)
Washington
Mientras la investigación parlamentaria continúa con el proceso de impeachment como telón de fondo y el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes llama a testificar a Rudolf Giuliani (abogado personal del presidente), varias investigaciones periodísticas revelan cómo la Casa Blanca usa la diplomacia al más alto nivel para promover sus intereses políticos.
Según el New York Times, Donald Trump habló recientemente con el primer ministro de Australia, Scott Morrison, para pedirle información que pueda desacreditar la investigación de Robert Mueller sobre la trama rusa, ya que fueron funcionarios australianos los que alertaron en primer lugar al FBI de que fuentes cercanas al Kremlin habían contactado al equipo de campaña del entonces candidato republicano para darle material perjudicial sobre Hillary Clinton.
Además, el Washington Post, cuenta cómo el Fiscal General, William Barr, se ha reunido al menos con oficiales italianos y británicos, siguiendo las órdenes del presidente, para recabar información con el mismo objetivo.
Tanto la Casa Blanca como el Departamento de Justicia confirman las conversaciones de Trump y de Barr con líderes extranjeros. El portavoz Hogan Gidley ha argumentado que son necesarias para la investigación que el Departamento de Justicia está llevando a cabo desde hace meses contra los servicios de inteligencia estadounidenses (el FBI y la CIA), que iniciaron las pesquisas sobre la trama rusa en 2016.
El presidente, por su parte, insiste en querer conocer la identidad del informante, protegida por ley, al que acusa de inventarse información sobre la llamada al presidente Zelensky de Ucrania. En una retahíla de tuits, asegura que el confidente denunció una llamada “con información de segunda mano” y eso, dice, “es un fraude”.
Dice además que si el juicio político termina con la destitución del presidente, “causará una fractura como la de la guerra civil” de la que este país “nunca se recuperará”
Trump ha sugerido “prisión por traición” para el presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara, Adam Schiff, por inventarse, asegura, el contenido de su llamada con el presidente de Ucrania, cuya transcripción publicó la propia Casa Blanca.
