Después de la 'tormenta' llega la calma
El Giro de Italia llega a Terracina con una etapa con final en llano que dará tranquilidad al pelotón después de las caídas
El pelotón del Giro de Italia durante el transcurso de la cuarta etapa / Fabio Ferrari/Lapresse via ZUMA (Fabio Ferrari/Lapresse via ZUMA )
El Giro de Italia llega a Terracina en una quinta etapa que recorrerá desde Frascati 140 kilómetros con una pendiente que va de más a menos, hasta el punto de finalizar en un completo llano. Será la primera vez en esta edición que una etapa baja de los 200 kilómetros -quitando la etapa inaugural que fue una contrarreloj-.
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Tras un martes en el que todo apuntaba a que lo único reseñable sería esa subida final, un imprevisto, una caída justo en la recta final de la etapa provocaba que uno de los principales favoritos a la maglia rosa, Tom Dumoulin, se dejase prácticamente sus aspiraciones al ceder algo más de 4' con Roglic. No fue el único que se cayó, Mikel Landa tuvo un incidente con Simon Yates saltando las chispas al llegar a la línea de meta.
Después de toda esta 'tormenta' llegará la calma con forma de recorrido llano, y una etapa mucho más corta de las celebradas hasta ahora, por lo que todo parece indicar que el ganador en Terracina saldrá del pelotón en la misma recta final, y podría ser un 'sprinter'.
La fuga del día podría producirse al poco darse la salida lanzada al comenzar con dos subidas sucesivas en los primeros 25 kilómetros de carrera, aunque los descensos que acontecen en los siguientes kilómetros pueden hacer que precisamente esa victoria final salga del mismo pelotón en el último momento.
Primoz Roglic continuará, salvo hecatombe, portando la maglia rosa en este Giro de Italia, aunque lo que probablemente no entraba en sus planes era que cediesen tiempo en este tipo de etapas rivales tan directos como Dumoulin o, por ejemplo, un Mikel Landa que tendrá que prepararse para la última semana de montaña si quiere hacerse con la victoria final.
