Ocio y cultura
Edvard Munch

El Museo Británico revela el gran secreto de 'El grito' de Edvard Munch

Una litografía 'perdida' revela un mensaje hasta ahora inédito del artista

Vista de la litografía "El Grito", del artista noruego Edvard Munch, durante la presentación de una instalación este miércoles sobre la obra en el Museo Británico de Londres (Reino Unido). / ANDY RAIN (EFE)

Madrid

'El Grito' de Edvard Munch es considerada como una de las obras artísticas más famosas de la historia del arte. Una serie de cuatro cuadros en la que podemos ver a una figura andrógina con la boca abierta y las manos en la cabeza que parece estar gritando de desesperación ante lo que le rodea. Todo ello gracias a la posición de sus ojos, su boca o sus manos. No obstante, podría no ser así.

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Con motivo del 75 aniversario de la muerte del pintor noruego, el Museo Británico ha decidido conmemorar al artista con una galería en su honor. Una exposición, compuesta de algunas de las obras más características de Munch, entre las que sobresale una versión hasta ahora inédita del clásico cuadro que nos ofrece otra manera de interpretar la obra del artista.

"Sentí un gran grito en toda la naturaleza"

La litografía, disponible desde este miércoles en el museo británico, destaca por una leyenda escrita a mano por el propio Munch: "Sentí un gran grito en toda la naturaleza". Una leyenda que ha servido a los expertos para determinar que Munch no retrató a alguien gritando, sino a alguien tapándose los oídos porque está escuchando el grito de la naturaleza, tal y como recoge The Telegraph.

Así lo ha dado a conocer la comisaria de la exposición Guilia Bartrum, quien interpreta la intención del autor desde otro punto de vista gracias a esta leyenda: "Esta versión de El Grito que estamos exhibiendo en el Museo Británico deja claro que la obra de arte más famosa de Munch representa a una persona que escucha un 'grito' y no, como muchas personas continúan asumiendo y debatiendo, que una persona grita".

La historia de El Grito

Según Bartrum, Munch caminaba por un fiordo de Oslo en 1892 cuando el cielo se puso de un tono rojizo. Una visión que tuvo un profundo efecto sobre él: "Munch incluyó deliberadamente el título de esta versión para describir cómo se inspiró en la ansiedad que repentinamente sintió. Estaba tratando de captar una emoción o momento en el tiempo. A través de la inscripción sabemos cómo se sintió."

Para ello, la comisaria se apoya en la ondulación de la figura, que se convierte en una representación de lo que el propio artista está sintiendo: "Tiene un obvio impacto emotivo que puede asociarse con su estado de ánimo. Todos hemos tenido esos momentos de desesperación".

Por lo tanto, se trata de una persona que escucha el grito de naturaleza, ya sea en su cabeza o no: "Siente la sensación de que la naturaleza está gritando a su alrededor. No tengo ninguna duda de que esta figura icónica está reaccionando a las fuerzas externas de la naturaleza en esa ladera. Lo que aún se puede debatir es si, para Munch, esas fuerzas eran reales o psicológicas".

David Justo

David Justo

(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...

 
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