Graban por primera vez a una tarántula gigante cazando una zarigüeya

Madrid

En el campo de la alimentación, cada especie de araña tiene sus propias preferencias. Mientras que algunas como la araña tigre apuestan por los saltamontes, otras como la araña moteada saltadora se decantan por los escarabajos. No obstante, la mayoría de familias tienden a decantarse por moscas, hormigas e incluso otras arañas más pequeñas.

A pesar de ello, también suelen darse singularidades que fascinan a los científicos del mundo. Recientemente, un grupo de investigadores de la Universidad de Michigan ha publicado un artículo, en la revista de divulgación científica Amphibian & Reptile Conservation, en el que reconocen haber detectado hasta 15 casos de interacciones extrañas entre depredadores arácnidos y presas vertebradas.

Desde ranas hasta una zarigüeya

Tras adentrarse en un bosque tropical de tierras bajas de la Amazonia de Perú, donde abundan los migalomorfos, los científicos descubrieron un comportamiento inusual de este tipo de arañas. Mientras que el resto de familias se alimenta de insectos, este tipo de tarántula gigante devoró a presas vertebradas como ranas, lagartos, serpientes y hasta mamíferos.

Entre estos casos destaca el ataque de una araña de estas características a una zarigüeya. Un ataque, el primero registrado por las cámaras, en la que podemos ver a un migalomorfo cazando a una zarigüeya para comérsela más tarde. Unas imágenes que demuestran "la poca valoración" que le ha dado la comunidad científica a los casos de depredación de vertebrados por parte de artrópodos, tal y como explica el biólogo evolutivo Daniel Rabosky en el artículo.

Cómo acaba la tarántula con una zarigüeya

En primer lugar, los investigadores llegaron a la remota región de Madre de Dios, en el sudeste de Perú, para estudiar la biodiversidad de sus bosques y la ecología de reptiles y anfibios. No obstante, y después de registrar casos de arañas que atacaban a todo tipo de vertebrados como lagartos o serpientes, decidieron centrar su investigación en las mismas. 

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Gracias a ello, los investigadores detectaron hasta 15 sorprendentes casos, entre los que destaca el ataque de la tarántula (según los investigadores tenía el tamaño de un plato de comida) a la zarigüeya. Después de acabar con ella gracias a su veneno, el arácnido transporta hasta una zona segura, donde aprovecha para comerse a su presa.