El Supremo da por hecho que tendrá que retrasar la testifical de Rajoy

Madrid

La realidad de la densidad y extensión de los interrogatorios se ha impuesto al deseo de celeridad del tribunal que juzga el procés. El magistrado Manuel Marchena ha anunciado que el próximo martes será el turno de los dos últimos imputados por declarar, Jordi Cuixart y Carme Forcadell, y que después empezarán a tomar declaración a los políticos llamados como testigos: entre las declaraciones que pueden retrasarse está la del expresidente Mariano Rajoy.

El anuncio ha sido realizado por Marchena al final de la sesión de este jueves, cuando ha terminado la declaración de Jordi Sànchez. Los dos últimos acusados por declarar lo harán el martes a partir de las nueve y media de la mañana - treinta minutos antes de lo habitual - y después empezarán los testigos. Si es necesario, ha dicho Marchena, será habilitada la mañana del viernes de la semana que viene, inicialmente fuera de calendario.

El testimonio de Mariano Rajoy y sus exaltos cargos - Soraya Sáenz de Santamaría, Cristóbal Montoro y Juan Ignacio Zoido - estaban previstos a partir del martes por la tarde, por lo que es probable que se retrasen a otro día. Lo mismo sucede con el resto de testigos, políticos retirados o en activo, de esta semana: Joan Tardà (ERC), la alcaldesa Ada Colau o el Lehendakari, Iñigo Urkullu.

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Las declaraciones de los imputados se están extendiendo más de lo esperado por el presidente del tribunal, que en un primer momento tenía pensado finalizarlas esta semana para empezar con los testigos el martes que viene. "La fijación de este vierners es una fijación preventiva, sólo si no diera tiempo a agotar la práctica de la prueba testifical señalada para la próxima semana", ha dicho Marchena.