Día clave para las ventas de armamento de España a Arabia Saudí

Madrid

Las ONG han pedido al Gobierno que la junta acuerde este miércoles la revocación de las licencias concedidas y también una moratoria en la concesión de licencias para nuevas ventas; pero el Ejecutivo no quiere someter a nuevas tensiones las recuperadas relaciones con Arabia Saudí ni poner en riesgo los cuantiosos contratos que trascienden las corbetas de Navantia.

Como ha sucedido con caso de las 400 bombas de Defensa, la Moncloa ha decidido que, al menos por el momento, todo el armamento comprometido con Arabia Saudí sea enviado en los términos acordados y que no se decrete ningún tipo de embargo unilateral -algo que haría saltar por los aires las relaciones Riad-Madrid-, así que, a partir de ahora, si el Gobierno tiene alguna duda sobre el nuevo armamento que le solicita Riad solo podrá jugar "al gato y al ratón de la diplomacia comercial".

Dado que las licencias de venta no han de ser concedidas en un plazo máximo, España podría dilatar lo máximo posible la concesión de las más delicadas -las de munición-, siempre y cuando esto no genere ninguna tensión con Riad. Ese es el límite de la cuerda.

De hecho, el Gobierno de Mariano Rajoy utilizó esta estrategia en 2015, dilatando durante un año la autorización de un envío de 40 millones de euros en munición de artillería con destino Riad por el riesgo de su uso en Yemen. La venta, eso sí, finalmente, se autorizó en noviembre de 2016, solo unos días antes de la visita a Riad del rey Felipe VI.